Las jugadoras del Deportivo Abanca: «Ojalá que nuestro ascenso abra el camino de los otros que puedan venir»

TORRE DE MARATHÓN

Senén Rouco

As Nosas celebran su éxito en La Voz y desean suerte al Deportivo y al Leyma ante los otros dos grandes retos del deporte coruñés en mayo

03 may 2024 . Actualizado a las 12:49 h.

Lo de ser pioneras lo llevan muy dentro. El Deportivo Abanca visitó este jueves las instalaciones de La Voz de Galicia para celebrar un deseado e ilusionante ascenso a la Liga F. Con el regreso a una categoría profesional después de dos años, han abierto el camino tanto a la plantilla masculina como al Leyma Básquet Coruña. «Puede ser un gran año para todos. Sí que es cierto que nosotras hemos abierto un poco la veda, y ojalá que los ascensos que se pueden conseguir al final se logren», señala Henar.

Todas a la una, remando por el mismo objetivo, estaban convencidas de que este sería su año. «Lo sentíamos así, estábamos convencidas de que lo íbamos a conseguir. Así que no hicimos ninguna apuesta porque sabíamos que, al pasar, tendríamos que cumplirla», recalca la asturiana entre risas.

El éxito de este equipo, un grupo humano muy unido, no es casualidad. Se priorizó el mantener la base de futbolistas del año pasado y se apostó por dejar trabajar a Irene Ferreras, figura clave de este ascenso. «Llevábamos mucho tiempo persiguiendo este objetivo. Esta temporada ha sido muy buena, hemos aprendido de la pasada, en la que nos costaban un montón los partidos fuera de casa», apunta Cris Martínez. La capitana, eso sí, recalca que también vivieron momentos duros, como el arranque de campaña y tras el parón navideño. Por su parte, Henar tiene claras cuáles son las claves que han llevado a As Nosas a ascender de categoría: «Para mí, la ilusión, el compromiso y el trabajo. El día a día es lo que nos ha llevado a conseguirlo».

Asimilar que el próximo año estarán en la máxima categoría del fútbol femenino español no fue sencillo. Entre fiestas, recibimientos institucionales y entrenamientos, que previsiblemente se alargarán hasta mediados de junio, les costó hacerse a la idea. «Lo hemos disfrutado. Fueron días de muchos actos y eventos. Nos lo merecíamos, a lo mejor no volvemos a hacer algo así. Pero ahora ya tenemos ganas de celebrarlo con nuestra gente. Estamos muy felices, ha sido duro», señala Martínez.

Más de 14.000 presenciaron en Riazor el encuentro con el Cacereño. Niños y niñas dejaban en las gradas una imagen tierna, celebrando en éxtasis el logro de As Nosas. «Al final eso es lo bueno, que nos vean a un equipo al que apoyar. No al masculino o al femenino, sino al Dépor», recalca la capitana.

Lucha por la profesionalización

Imágenes como las de aquel domingo en el estadio coruñés demuestran cómo el fútbol femenino sigue rompiendo barreras. «Cuando todas empezamos ni nos imaginábamos que situaciones como las de ahora pudieran darse. Pero miras otros países, como Inglaterra, y ves que están muchísimo más avanzados. Ojalá que nosotras, a corto plazo, podamos alcanzar algo así», señala Henar. La centrocampista es consciente de que se llegará cuando «los clubes apuesten firmemente por el fútbol femenino». «Espero que todos lo hagan como se está haciendo aquí. Eso nos hará llegar a donde está ellas [las jugadoras de la liga inglesa]», sentencia.

Las almas de la fiesta, la canción amuleto y una divertida visita

Una temporada repleta de éxitos también ha permitido a las jugadoras recolectar un buen compendio de anécdotas, de las que en la redacción de La Voz contaron «las que se pueden». Quedó claro que las almas de la fiesta fueron Eva y Sara, a las que vieron disfrutar el triunfo «en el Brit», y una Carlota que se ha convertido en la iniciadora de todos los cánticos del vestuario. Sin que lo hiciese ella, de hecho, las compañeras no se atrevían a arrancar. También hablaron sobre la música del vestuario, de la que sobre todo es responsable Lucía Alba, quien reconoció que pincha un poco de todo, pero que por las mañanas intenta «algo relajadito, que es muy pronto». La que suena siempre es La Despedida, de Daddy Yankee, aunque la imprescindible para las celebraciones fue Mambo, de Kiko Rivera.

Cuando baja la música, es Ainhoa Marín la última en alzar la voz antes de un partido: «Es una forma de quitarse los nervios». Fue la única que deslizó una apuesta por el ascenso: «Creo que dije que me rapaba una ceja», murmuraba con Millene. Detalles del vestuario que comentaron en la redacción de La Voz tras una divertida visita a la rotativa. No perdieron el carácter fiestero en ningún momento, jugando a los troncos locos entre rollos de papel o interesándose por la maquinaria del museo Santiago Rey Fernández-Latorre.

Felices de poder jugar cada vez más en Riazor, y conscientes de que debe ser sostenible

El estadio de Riazor fue reservado para las ocasiones más especiales de As Nosas este curso. Frente al Alavés y el Europa se superaron los 7.000 aficionados, y el día del Cacereño se dobló esa asistencia para arropar a las blanquiazules, que confirmaron el ascenso tras una goleada.

Un apoyo masivo que plantea si Abegondo se les quedará pequeño la próxima temporada, de lo que ellas también hablaron en su visita a La Voz: «Todas las que estamos aquí, y cualquier futbolista, soñamos con jugar en Riazor y ante tanta gente. Es verdad que en Abegondo siempre hemos estado muy bien arropadas y las gradas se han llenado, pero nos gustarían más días en Riazor», comentó Raquel García.

«De todas formas, hay que puntualizar que, aunque nos gustaría, debe de ser sostenible. Y a día de hoy es una realidad que no es sostenible que nos abran el estadio cada fin de semana para nosotras. Poco a poco vamos avanzando y la afición en A Coruña siempre responde. Si sigue siendo así, seguro que jugaremos muchas más veces», razonó a continuación Henar, una de las capitanas de la plantilla deportivista.