Qué es la operación Puente de Menai: Buckingham actualiza el plan para el funeral de Carlos III
GENTE
La casa real británica utiliza desde hace años nombres de puentes para bautizar los planes de despedida de algunos miembros de la familia, como la reina madre, el duque de Edimburgo e Isabel II. «The New York Post» publica que el estado del rey sería más grave de lo que aparenta tras detectársele un cáncer hace unos meses | ¿Qué se sabe de Kate Middleton?
26 abr 2024 . Actualizado a las 12:34 h.En los últimos meses, las especulaciones han rodeado a la familia real británica. Parece que tras la muerte de la reina Isabel II, un ejemplo buena salud y longevidad como lo fue su esposo el príncipe Felipe y su madre (todo ellos fallecieron siendo casi centenarios), los miembros de la monarquía no levantan cabeza.
Y lo cierto es que como ya se demostró con el caso de Kate Middleton, que anunció el pasado 22 de marzo que sufría cáncer tras hacerse público el pasado mes de enero que había sido operada de una cirugía abdominal, la falta de información por parte de palacio, no hace más que alimentar la rumorología. Ahora varios medios estadounidenses aseguran que desde palacio se ha puesto en marcha el plan actualizado de la operación Puente Menai, que contempla el protocolo de un hipotético funeral de Carlos III.
A principios de febrero, cuando ya se especulaba con el verdadero estado de la princesa de Gales, Carlos III anunciaba que sufría cáncer tras someterse a una operación rutinaria de próstata. No se dieron muchos datos, pero sí se explicó que no era de próstata y que cancelaba su agenda para someterse a tratamiento. Ni se sabe el tipo de cáncer y que zona afecta ni el estadio en el que está ni el tratamiento al que se estaría sometiendo en estos meses para atajarlo.
De hecho, se ha llegado a especular con que no estaría optando por la radioterapia o la quimioterapia, si no por otros tratamientos alternativos, ya que Carlos III sería gran seguidor de la medicina natural.
A pesar de que sus apariciones han sido contadas en este tiempo, y es evidente que ha perdido peso, lo cierto es que se le ha visto con muy buen estado. La última fue el 21 de abril —día en el que la reina Isabel hubiese cumplido 98 años— cuando se dejó ver al volante de su propio coche con la reina Camilla asistiendo a un servicio religioso en una iglesia cercana al Palacio de Balmoral, en Escocia.
Una imagen tranquilizadora que contrasta con las informaciones que se han dado en las últimas horas sobre el estado del rey Carlos en medios de comunicación como el The New York Post, donde aseguran que la salud del soberano británico se estaría «deteriorando progresivamente».
Según dicho periódico, la situación sería tan preocupante que Buckingham habría puesto en marcha la maquinaria para el «inminente funeral» del rey Carlos III. Y es que a pesar de que continúa su batalla contra el cáncer, fuentes cercanas habrían revelado que se encuentra «mucho peor de lo que dejan entrever, realmente mal».
El periodista Tom Sykes, del periódico Daily Beast, asegura también que «cuando he hablado con amigos del rey en las últimas semanas sobre su salud, 'no pinta bien' es la respuesta más repetida».
De ahí que los preparativos para su funeral —que se pusieron en marcha por protocolo al día siguiente del entierro de Isabel II—, denominado operación Puente Menai y planeado desde hace mucho tiempo, se estarían «actualizando activamente», para que todo estuviese perfectamente detallado si el desenlace fuese próximo como especula la prensa norteamericana, ya que la británica mantiene un silencio absoluto sobre este tema.
Mientras los rumores sobre el empeoramiento de Carlos III no dejan de aumentar, nada se sabe del estado de Kate Middleton y de cómo está sobrellevando el tratamiento contra el cáncer que hizo público, acabando con las especulaciones, el pasado 22 de marzo en un vídeo que conmovió al mundo. Alejada del foco mediático y centrada en sus hijos y en su recuperación, la princesa de Gales cuenta con el apoyo incondicional del príncipe Guillermo, que ha reducido considerablemente su agenda para estar al lado de su mujer en estos durísimos momentos.
¿En qué consiste la operación Puente Menai?
En el año 1960, poco después de la llegada al trono británico de Isabel II, comenzó a planificarse la operación Puente de Londres, que contemplaba los pasos a seguir ante la muerte de la monarca. Los detalles se fueron actualizando poco a poco hasta que tuvo que ponerse en marcha, el pasado ocho de septiembre del año 2022. Este protocolo tenía incluso contemplado qué hacer si la reina Isabel II moría en Escocia, como finalmente ocurrió, bajo la denominación Operación Unicornio. Tras el fallecimiento de la reina, se pusieron en marcha unas estrictas normas de cómo comunicar paso a paso esta noticia y los pasos a seguir en los doce días que duró el funeral.
Bajo el nombre en clave de «London Bridge is down [el Puente de Londres ha caído», el secretario personal de Isabel II, el exdiplomático Christopher Geidt, diseñó un operativo medido al milímetro en el que estaban programados todos los hitos. El primer paso fue comunicar el nombre en clave del deceso de la reina a la primera ministra, ella informó a los 36 países de la Commonwealth. Este no era el único plan secreto preparado para la muerte de la monarca. La Operación Unicornio, pensada por si Isabel II fallecía en Escocia —como ocurrió— establecía punto por punto qué hacer para trasladar el féretro a Londres en un tren especial.
En el caso de la operación Puente Menai, que toma su nombre del puente colgante ubicado entre la isla Anglesey y Gales, contempla los detalles del posible fallecimiento de Carlos III. A la vez que se desarrolló este protocolo, también se trabaja en la sucesión en el trono que supondría la muerte del rey, con el ascenso al trono de su sucesor, el príncipe Guillermo de Inglaterra. Ese protocolo incluye departamentos del Gobierno como la Iglesia anglicana, la Policía Metropolitana de Londres, las fuerzas armadas, los parques reales, los medios de comunicación, la Autoridad del Gran Londres y hasta el transporte municipal, según explicó un ex miembro del personal vinculado a la corte británica al Daily Beast.
«Esos planes han sido desempolvados y se están actualizando de manera activa. No es más de lo que cabría esperar dado que al rey le han diagnosticado un cáncer. Pero el hecho de que estén circulando sí que ha hecho saltar las alarmas», aseguró, matizando esos sí que ese protocolo está en constante revisión, y más estando el monarca enfermo.