Un vídeo viral en TikTok critica la actitud de los turistas en Santiago: «La gente que viene a hacer el Camino nos ve como un decorado»

LA VOZ SANTIAGO

VIVIR SANTIAGO

La usuaria de TikTok @anaaapaz reflexiona en un vídeo que ha generado múltiples reacciones en la red sobre el comportamiento de los peregrinos al llegar a la capital.
La usuaria de TikTok @anaaapaz reflexiona en un vídeo que ha generado múltiples reacciones en la red sobre el comportamiento de los peregrinos al llegar a la capital.

Una usuaria de la red social hace referencia a la visión que interpreta de los peregrinos sobre los picheleiros: «Estoy convencida que nos tienen como personas pintorescas viviendo en una ciudad medieval»

26 abr 2024 . Actualizado a las 22:31 h.

Si la idea de regular el turismo en ciudades como Santiago está a la orden del día, las redes sociales también se hacen eco de ello. En el scroll infinito de TikTok, un vídeo que suma casi ochenta mil visualizaciones y diez mil me gustas reflexiona acerca de la actitud de los peregrinos y visitantes que cada día llegan a la capital. «Para ellos no somos personas normales, somos un decorado en su Camino. Con esto no estoy diciendo que todo el mundo sea así, pero hay mucha gente que sí», dice ante la cámara una influencer gallega conocida en la red social como @anaaapaz. 

«Ellos van por Santiago y creen que están en una película. Estoy convencida que nos tienen como gente pintoresca viviendo en una ciudad medieval, como dijo Rojuu», dice la joven en referencia a los polémicos calificativos que empleó el rapero en aquella entrevista hecha por Broncano en La Resistencia. «Los peregrinos llegan gritando, siendo unos maleducados y unos cerdos, porque antes se ponían a comer y a beber en la Praza do Obradoiro, que eso ni lo hacemos nosotros», continúa en un vídeo que apenas llega al minuto y medio de duración.

@anaaapaz

NO TODO el mundo es asi pero mucha gente si

♬ sonido original - ana ðŸ«ðŸŽ§

Apela al «fenómeno Santiago de Compostela», pero extrapola la situación a otros puntos turísticos de la comunidad. «El año pasado fui a Combarro y le escuché a decir a una familia que la gente tendía la ropa por la ventana, como alguien normal, para que las fotos que se hacían quedasen bonitas y pintorescas. Siempre que voy a cualquier pueblo de verano, como pueden ser Sanxenxo, Baiona o Portonovo, aunque solo sea un día, lo noto», recuerda la tiktoker, que concluye la publicación incidiendo en que «mucha gente que viene a hacer turismo a Galicia, o el camino de Santiago, nos ve a los gallegos como un decorado».

Abriendo los comentarios, queda demostrado que el malestar es generalizado. Algunos usuarios, de otras partes de España, dejan constancia de que el fenómeno también llega a sus respectivas comunidades. «¡Díselo, reina! A los asturianos también nos pasa», «En Andalucía nos está pasando lo mismo, solo estamos para hacerle gracia a la gente que viene», «En Cudillero le preguntaron a mi prima si ahí en invierno vivía alguien o si era un decorado con casas vacías para la foto», o «Ser de Canarias es vivir eso a nivel extremo» son algunos de los que suman más me gustas. 

Otras personas usuarias de la red social y residentes en Santiago dejan constancia de que el problema está latente en la ciudad: «Literal que en la cafetería de debajo de mi piso he visto a peregrinos con los pies descalzos encima de la mesa» o «Soy de Santiago y estoy totalmente de acuerdo contigo, lo veo cada día» son algunos de ellos. Tal y como lleva meses recogiendo La Voz, el problema del turismo masivo y su posible regulación ha alimentado parte del debate público en la ciudad desde tiempo atrás. 

Sin ir más lejos, la edición de este viernes recoge otro de los avances del Concello en su estrategia para ordenar el turismo y moverlo de la Catedral y su entorno. El gobierno municipal estudia la posible aplicación en Compostela de medidas que ya se han implementado en otras ciudades, como la limitación del número de personas que pueden visitar en grupo determinados lugares, que se aplica desde este mes en San Sebastián y que ya funcionaba desde el año pasado en Barcelona. Aunque las apuestas a corto plazo están más centradas en el refuerzo de campañas centradas en combatir los ruidos y en la concienciación sobre el respeto al patrimonio urbano, Raxoi también avanza en la disposición de dispositivos que le permiten recabar información sobre los flujos de los turistas con alto grado de detalle, diferenciándolos incluso de los residentes y de los excursionistas.