El pianista, considerado como el mejor de su generación, abarrotó el Palacio de Congresos de la capital gallega
13 may 2010 . Actualizado a las 12:34 h.La música clásica no siempre genera grandes estrellas. Estrellas que sobrepasan los circuitos del género. Lang Lang es una de esas estrellas que llaman la atención de los espectadores más allá de la música. El pianista chino actuó en el noche de ayer en Compostela, dentro del ciclo Xacobeo Classics, y la nube de cenizas volcánicas no le impidió llegar a la capital gallega echando mano de sus influencias.
Según contó ayer el director artístico del Xacobeo Classics, en la noche del martes Lang Lang actuó en la ciudad italiana de Turín. César Wonenburger explicó que gracias a uno de los patrocinadores del pianista, una firma de aviación privada, se consiguió evitar que el concierto fuese suspendido. Un concierto que tanto el director artístico como el gerente del Xacobeo, Ignacio Santos, calificaron como una de las «grandes citas del año».
Lang Lang aseguró sentirse «muy contento y muy feliz de poder tocar por primera vez en Galicia». También se mostró encantando de participar en un festival «importante», del que después de ver su cartel comentó que contaba «con músicos de primera línea mundial».
A preguntas de los periodistas, el pianista señaló que el próximo mes de septiembre publicará un nuevo disco que tendrá como repertorio el primer cuaderno de la Iberia de Isaac Albéniz, un autor que figuraba en el concierto de anoche en el Palacio de Congresos de Compostela junto a Beethoven y Prokófiev.
Ignacio Santos explicó también en la presentación de ayer que la figura de Lang Lang excedía lo musical y señaló que en la actualidad en China «hay cuarenta millones de jóvenes que estudian piano siguiendo el ejemplo de Lang Lang». En este sentido, César Wonenburger apuntó que ese seguimiento de la figura y de la música de Lang en su país y en el mundo significaba que el pianista «también representa el futuro de la música».
Tras actuar en la Expo de Shanghái, Lang Lang inició una gira europea que lo dejó en Turín en la noche del martes y que le permitió tocar por primera vez en Santiago. Para el mediodía de ayer, el pianista pidió un restaurante chino en la ciudad, pero para la noche la organización del Xacobeo tenía previsto llevarlo a cenar de manera que pudiera probar el marisco gallego del que habló muy favorablemente, en la rueda de prensa.
En cuanto al repertorio elegido, con piezas de Beethoven, Prokófiev y Albéniz, explicó que era un repertorio que estaba utilizando de manera habitual en esta gira. La inclusión del compositor español la justificó señalando que era «uno de los clásicos de la música de todos los tiempos» y comentó el «exotismo» de sus obras. También comentó que era habitual incluirlo en sus conciertos en España al tiempo que señaló la novedad de su disco para el próximo mes de septiembre. Añadió el pianista chino que Albéniz no era el único compositor español que figuraba en su repertorio y citó la obra de Granados como otro de los autores que suele interpretar.
La presencia de Lang Lang despertó gran expectación en la mañana de ayer. El músico se mostró asequible, se dejó fotografíar con todo el mundo que se lo pidió y todavía bromeó con los periodistas en su primera cita con la prensa gallega en el edificio del Xacobeo en San Lázaro a propósito de los flashes que no dejaron de iluminar durante toda la rueda de prensa y del ritmo de los silbidos de sus aparatos.