Un agente de la Policía Local acudió al consistorio, a petición del regidor, aunque no tuvo que intervenir
28 nov 2007 . Actualizado a las 02:00 h.La reiterada desobediencia del portavoz popular Guillermo Leal a las órdenes del alcalde, el socialista Melchor Roel, máxima autoridad de la corporación municipal, derivó en la suspensión del pleno ordinario del lunes, cuando faltaba un único asunto por votar y el apartado de ruegos y preguntas. Ante la imposibilidad legal de proseguir la sesión mañana, como inicialmente anunció el regidor, éste convocará un pleno extraordinario para el próximo lunes, con los contenidos pendientes.
El portavoz socialista, Rafael Fernández Amor, calificó de «diálogo de besugos» el debate previo en torno a la moción del BNG contra la violencia de género. Y una concejala del PP repitió la expresión a media voz desde la otra bancada. Entonces el alcalde la conminó a guardar silencio y Leal lo interpretó como trato discriminatorio a su grupo y salió en su defensa. Leal desoyó la orden de Roel de callarse y, a continuación, también la orden de expulsión de la sala. El regidor suspendió la sesión durante quince minutos y avisó a la Policía Local. Tras el receso, y con la presencia de un agente, Roel optó por suspender definitivamente el pleno para evitar, dijo, la intervención de la Policía (para sacar de la sala a Leal). «Y para que el agresor no quedara como víctima», señaló ayer en rueda de prensa.
El alcalde reprueba la actitud «chulesca y prepotente» del portavoz popular -«el virtual, que no el jefe real», comentó- que, abundó, le llevó a «desafiar las normas democráticas por las que se rige este Concello». Roel dijo que, a partir de ahora, aplicará el reglamento de forma más restrictiva en el pleno, «porque el PP confunde tolerancia con cobardía o debilidad». Insistió en que no discrimina a los populares pues, constató, también manda callar a los suyos cuando se salen del guión. Y aseguró que suele hacer oídos sordos a los comentarios insultantes sobre algunos portavoces que salen de las filas del PP en los plenos. «La secretaria municipal comentó que en los 16 años que lleva en el Concello de Viveiro nunca vio una actitud de desacato a las normas que rigen los plenos», afirmó. Roel achacó el incidente al «nerviosismo de Leal, por la presencia del jefe real (César Aja) en el pleno».