El regidor viveirense y el interventor municipal se enzarzaron en una acalorada discusión sobre el pago del arrendamiento del local del fondo de la plaza Maior, cuya propietaria es Isabel Pernas Bujados.
Roel dijo que había pagado los tres primeros meses de alquiler (900 euros), «para no perderlo, ya que el interventor no lo abonaba». El alcalde viveirense aseguró que el interventor obvió que «la corporación decidió invertir 90.000 euros del plan Zapatero» y realizó un informe contrario «simplemente para esconder su ineptitud en este y otros muchos casos», zanjó.
El interventor se defendió diciendo que él «entendía que el local no reunía las condiciones sin una previa adecuación y reforma, para lo que hacía falta consignación presupuestaria». Roel le replicó afirmando que «el alcalde puede firmar un contrato y buscar la financiación en cuatro años sin pedirle permiso a usted ni a ningún funcionario, solo al pleno».
Asimismo, el interventor indicó que «el contratro que me presentó es del año 2007, por lo que si no se pagaron las cantidades de ese año es porque hasta el 2008 no se me dejó el contrato y en el 2007 no había fondo Zapatero», a lo que Roel le espetó que «no me hable del 2007, porque lo pagué yo, hábleme del 2008», y lo culpó de que «por su informe estén en peligro 90.000 euros para actividades socioculturales en Viveiro».