El alcalde socialista de Viveiro, Melchor Roel, acusó al presidente del PP de Viveiro, César Aja, de «autoinculparse» de no haber legalizado en el año 1997 el edificio de la calle Nicolás Cora, en O Valado, sobre el que pesa una sentencia de derribo.
Roel quiso dejar claro, en primer lugar, que «es mentira que nadie del PP de Viveiro, ni personalmente, ni por escrito, nos haya hecho llegar ninguna solución a este problema creado cuando ellos gobernaban», aclaró. En segundo lugar, se refirió a la propuesta formulada por Aja, a través de la cual le invitaba a aplicar «a este edificio el mismo criterio que se adoptó para el número 42 de la misma calle», rezaba el comunicado enviado por el anterior regidor.
Roel entiende que «si el informe técnico municipal que se hizo para ese lado de la calle fuera la solución, el señor Aja se está acusando de algo muy grave. ¿Por qué no utilizó esa normativa, que estaba en vigor desde el año 97, siendo la única publicada la del Pepri, en lugar de llegar a la firma de un convenio de 20 millones de pesetas por el que estamos imputados todos los concejales?», se preguntó el regidor, quien reiteró que «lo que plantea el informe para el número 42 estaba en vigor con anterioridad a la sentencia del 98 y, por supuesto, con anterioridad al mencionado convenio que llevó al pleno. Él mismo se acusa de no utilizar el Pepri en los años 1997, 1998 y en adelante, después del conocimiento de la sentencia», manifestó.
Roel indicó que «habrá que ver qué intereses comunes tenían quien otorgó la licencia y quien la solicitó», afirmó.
En tercer lugar, el alcalde aseguró que «nosotros sí estamos trabajando para agotar todas las vías, administrativas, jurídicas y políticas, que eviten que los vecinos se vean perjudicados», por lo que convidó al presidente del PP de Viveiro a que «por el bien de estos vecinos nos deje trabajar a los que podemos hacerlo, esto es, toda la corporación municipal, con el gobierno y este alcalde a la cabeza, lógicamente», invocó Roel.
Finalmente, el regidor viveirense apuntó que si Aja «califica de actitud chulesca la actitud coherente y honesta por la que seguimos buscando con todos los portavoces municipales una solución para que no se lleve a cabo la demolición, con todas las consecuencias, viene a decir que lo que yo tendría que haber hecho era haber firmado hace dos años el derribo de los pisos afectados en Lodeiro y el edificio de la calle Nicolás Cora», concluyó.