Los dos equipos mariñanos mejor colocados en la lucha por el ascenso en Primera Autonómica salieron mal parados de la última jornada, pasada por agua y con sorpresas en todas las guerras. Por la zona alta, el Burela y el Ribadeo ahora ven más lejos al Chantada, infalible una semana más, y el Lourenzá se engancha al grupo perseguidor del líder, mientras que en el otro extremo de la clasificación el Folgueiro ganó puestos y moral, y el Iberia y el Valadouro se despeñaron hasta los puestos de descenso.
A falta de fútbol, la emoción dio lustre al derbi mariñano disputado en Santa Cruz, donde un solitario gol del laurentino Moncho sirvió a los locales para vencer al Burela. Los dos técnicos aseguraron haber visto un duelo condicionado por el mal estado del terreno de juego, «impracticable». «Era imposible dar máis de dous pases seguidos», apunta el burelense Suso Pena. «Fue un partido sin fútbol, de mucha brega y con continuas disputas aéreas», corroboró Segundo López, el preparador anfitrión.
«Na primeira metade o meu equipo estivo impecable, creou dúas ocasións moi claras e disparou 8 ou 9 veces contra a portería de Xoel, que foi de largo o mellor do partido. Na segunda igualáronse as forzas e se ben é certo que o Lourenzá puido sentenciar, creo que non merecemos perder este encontro», sostiene el preparador del Burela. Por su parte, Segundo López se limitó a recordar que «hubo ocasiones para todos» y que su equipo contabilizó un remate al travesaño.
A la hora de extraer conclusiones, Suso Pena se queda con la inmejorable respuesta de sus hombres en un terreno de juego en condiciones tan adversas, de lo que dudaba. «Demostramos que sabemos competir en campos nunhas condicións desfavorables», dijo. Y el técnico laurentino se reitera en su opinión de que a día de hoy el Lourenzá es un equipo «estable», aunque no por ello cambia el discurso. «¿Mirar hacia arriba? Solo pensamos en asegurar la permanencia cuanto antes», insiste.
La mayor sorpresa de la jornada la protagonizó el Santaballés en el Pepe Barrera, donde se impuso por 0-1 al Ribadeo. «Para nós foi un paso atrás importante [...] Se o campo non mellora, é parece que será así, imos ter moitas dificultades para gañar na casa», asegura Vilachá, el técnico ribadense.