El sábado, en San Roque do Monte se encenderá la mecha de las fiestas. El santo homenajeado camina en este lugar de San Miguel de Deiro acompañado por su fiel perro. Pero este can no es el auténtico protagonista de las celebraciones locales: la mascota oficial son las burras, animal que luce en las camisetas de oficiales de la organización de los festejos y protagonista absoluto de una carrera que tendrá lugar el próximo lunes, a partir de las siete de la tarde.
Sabe bien la organización que la carrera de burras es el plato fuerte del programa de actos. No solo lo saben, si no que se sienten orgullosos de ser los anfitriones del certamen de estas características más antiguo de toda Galicia: este año se alcanza la edición número 112, lo que no es poco. A competir en Vilanova llegarán animales procedentes de muchos lugares, algunos desde puntos tan lejanos como Melide. De fuera es, precisamente, Ferrari, la campeona de los últimos años. Una «besta humana», en palabras de los organizadores de las fiestas, quienes recuerdan que en Vilanova, el lunes, además de la carrera habrá una competición de juegos tradicionales: desde el tiro de cuerda hasta la subida al palo.
Amplio programa
Pero, aunque esos actos puedan resultar los más sorprendentes, la comisión de fiestas ha prestado una exquisita atención a todas las actividades que deben formar parte de un programa de estas características. Música, pasacalles y los actos religiosos de rigor se sucederán, durante cuatro días, en este rincón de Vilanova.