Una cadena de dos mil personas recorrió el puente en defensa del instituto
13 oct 2011 . Actualizado a las 06:00 h.El 19 de noviembre de 1994, hace casi 17 años, varios miles de vecinos de A Illa cruzaron el puente caminando para entregar en el Concello de Vilanova, del que entonces dependían, el expediente de segregación. En aquella ocasión, la comitiva estaba encabezada por los mayores de la localidad. Ayer esa imagen volvía a repetirse, solo que esta vez eran los más jóvenes, muchos de los cuales todavía no habían nacido en aquel 1994, los que abrían la marcha convocada para reivindicar una serie de mejoras educativas en el instituto.
La cita era al mediodía de la jornada festiva de ayer. A esa hora los isleños estaban llamados a concentrarse en la explanada de O Bao para después organizar una cadena humana a través del puente. Y vaya si respondieron. Unas dos mil personas participaron en esta singular protesta con la que los vecinos de A Illa quieren demostrar que «non nos parece xusto o que están facendo» y que «aínda que non nos fagan caso, seguiremos dicíndolles que non estamos de acordo».
Las pancartas
Minutos después de mediodía, la larga marcha partía hacia el puente. A la cabeza, los alumnos del instituto portaban varias pancartas y un ataúd con el que querían simbolizar la muerte de la educación pública. «Máis profes e menos tonterías», «As escolas non son latas de sardiñas» o «Indemnizacións ás caixas e nas escolas rebaixas» eran algunas de las proclamas que podían leerse en los carteles.
Bajo un sol de justicia, abuelos, padres, jóvenes e incluso muchos bebés participaron en esta caminata que debía llevarles al otro extremo del puente para, desde allí, formar una cadena humana que cubriese los casi dos kilómetros de longitud que tiene el viaducto de A Illa. Por no faltar, no faltaron ni las gaitas. Varios músicos de la asociación Dorna animaron este particular paseo que llenó de gente el carril bici y la zona peatonal del viaducto que une la localidad insular y el continente. Incluso se sumaron a la protesta algunas personas que disfrutaban de un agradable paseo por el municipio y que, viendo que se trataba de una movilización por la educación, decidieron unir sus pasos a ella.
En el recorrido algunos de los participantes comentaban que hacía muchos años que A Illa no vivía una protesta de ese calibre, quizás desde aquellas que les unieron en la lucha por el puente o por la segregación del municipio.
Hora y media de camino
Tras prácticamente hora y media de recorrido, y de vuelta ya en O Bao con las piernas cansadas pero con el ánimo incólume, a los participantes les esperaba todavía un alto, antes de ir a cumplir con el estómago, para hacer balance y avanzar los próximos movimientos.
Desde el equipo docente del instituto agradecieron a los vecinos la «tremenda manifestación cívica» con la que acababan de mostrar su apoyo a las reivindicaciones de los padres de alumnos del centro. Añadían que A Illa necesita «un ensino público de calidade» y que, si para ello «hai que traballar máis, traballarase, pero necesitamos medios para facelo».
Por su parte, los padres, a través de Ramón Dios, destacaron que cada día van sumando más apoyos a sus reclamaciones, que siguen siendo las mismas con las que comenzaron sus protestas hace ya un mes y medio. Hay que recordar, en este aspecto, que los padres de alumnos del instituto de A Illa exigen un profesor más a media jornada, una aula más -tres en total- para segundo curso y el compromiso de una futura ampliación.
«Se hai que traballar máis, traballarase, pero necesitamos medios para poder facelo»
«Temos que seguir adiante, porque non somos menos, cada día que pasa somos máis»
Ramón Dios