Los socios del Liceo de Noia reeligieron anteayer por la noche a José Moas Pazos como presidente de la entidad para los próximos cuatro años. Este hombre seguirá, por tanto, encabezando una sociedad que cuenta con 3.110 afiliados.
En esta ocasión, Moas Pazos tuvo que pelear por el puesto con Carmen Cienfuegos, una mujer que lleva cuatro años ligada a la entidad y que se presentaba por primera vez al cargo de presidenta. Finalmente, las urnas no dejaron lugar a dudas, pues Moas Pazos revalidó su mandato, sobre las once y media de la noche, gracias a 406 de los 432 votos que los socios depositaron en las urnas. Tres de ellos estaban en blanco.
Horas después de alcanzar de nuevo el puesto, Moas Pazos contó que en esta ocasión a punto estuvo de no presentarse a las elecciones, pero que la escasez de candidatos hizo que al final se animase para seguir al frente de una institución que cuenta con más de cincuenta años de historia a sus espaldas.
Presupuesto
Hablar del Liceo no es hacerlo de cualquier sociedad, ya que es una de las entidades de la comarca que más socios tiene en sus filas, y por lo tanto, también una de las que más dinero gestiona. «El Liceo de Noia ya cuenta con un importante patrimonio, que se fue consiguiendo con el dinero de los socios y con mucho esfuerzo, pues cuando yo llegué aquí la sociedad estaba casi en bancarrota. Y con eso no se puede jugar», recalcó ayer el presidente.
Luego, indicó que este año la directiva tiene en su haber un presupuesto de 521.200 euros para hacer frente a los gastos que generan las actividades y el personal que las atiende, así como para poner en marcha nuevos proyectos. En ese sentido, Moas comentó ayer que uno de sus objetivos es instalar puntos de atraque en las orillas del río Tambre. «Queremos hacer una zona de pantalanes en las riberas del río Tambre. Varios socios nos comunicaron que están interesados en adquirir embarcaciones, y nosotros intentaremos proporcionarles un sitio para tenerlas», aseguró el presidente del Liceo antes de aclarar que los puntos de amarre solo podrán ser usados por los socios, y que serán para barcos de pequeñas dimensiones.
Pero esto no es todo, pues la directiva también tiene en mente poner en marcha un club de remo olímpico. «Todavía tenemos que estudiar la idea, pero creemos que al lado de las tierras que tenemos en Ceilán hay una zona del río que es muy adecuada para que los jóvenes practiquen remo olímpico, aunque tenemos que ponernos en contacto con la federación y ver qué subvenciones se pueden pedir para sufragar las obras, puesto que esto conllevaría la construcción de unas naves para guardar las embarcaciones», dijo el dirigente del Liceo noiés.
Además, el presidente desea incluir entre las actividades que ofrece la entidad clases de piano, así como ampliar el número de personas que forman parte de la directiva.
En esa línea, Moas apuesta por la llegada de personas jóvenes a la cabeza del Liceo, para que puedan ponerse en marcha iniciativas pioneras. Además, está convencido de que la entrada de personas con pocos años es la única solución para que el Liceo de Noia tenga asegurada su supervivencia y fortaleza.