La arena de la regeneración de Tanxil y Barraña favorece el extraño fenómeno
07 mar 2009 . Actualizado a las 02:00 h.Las lluvias que este invierno empaparon la comarca coruñesa de Barbanza y, posteriormente, unos días de sol y temperaturas primaverales fueron suficientes para que unos terrenos tradicionalmente áridos como son las playas de la zona se convirtiesen, de repente, en suelo fértil. Prueba de ello es la playa de Tanxil, en Rianxo, regenerada el año pasado por el Ministerio de Medio Ambiente y que ahora luce un manto de hierba que se abre camino entre la arena. Lo mismo ocurre en Barraña, la joya del turismo de Boiro, que se rellenó con toneladas de los mismos materiales que en Tanxil -muy criticados en su día por tratarse de áridos procedentes de cantera- y donde el verde comienza a asomar en la superficie reservada a los bañistas.
Nunca antes había ocurrido algo semejante, por lo que parece ser que los trabajos de regeneración que Costas llevó a cabo en los arenales son los responsables del fenómeno, que muchos descubrieron en las últimas semanas al aprovechar el buen tiempo para dar un paseo por la playa. En su caminata se toparon en la arena, cual oasis que surge en medio de un desierto, con las hierbas que crecen en cualquier finca o jardín.
Los rianxeiros tienen en Tanxil, que con los rellenos realizados el año pasado multiplicó su superficie, un manto de césped que ya quisieran para sí los campos de fútbol de la localidad. Además, quién sabe, hay quienes aventuran que este hecho igual podría dar lugar a un nuevo paso en la evolución y al nacimiento de una nueva especie vegetal resistente a la salitre.
Al margen de la sorpresa general que causó este descubrimiento, hay más peros sobre el estado de Tanxil, ya que las mareas arrastraron en algunos puntos la capa más superficial de arena, dejando al descubierto una especie de gravilla gris.
Desde el Concello indican que, al igual que todos los años, está previsto limpiar y adecuar las playas del municipio con la llegada del buen tiempo. Lo que no está demasiado claro es si se removerá la arena para cubrir esas zonas en las que la grava ha quedado al descubierto. En principio, no estaba prevista esta operación, dado que los trabajos de regeneración se hicieron, precisamente, para evitar estas actuaciones. Aún así, el Ayuntamiento dice que este asunto se estudiará llegado el momento.
Socavones
Donde sí será preciso llevar a cabo una intervención importante es en la playa boirense de Barraña. En este arenal, además de crecer la hierba, se han formado unos enormes socavones debido a los torrentes de aguas fluviales sin canalizar. La erosión que provocaron obligará a que las máquinas regresen al arenal para cubrir las zanjas que se han formado durante el invierno.
A diferencia de lo que ocurre con el arenal de Tanxil, la regeneración de Barraña aún no está completada, ya que la actuación en esta playa es más compleja e incluye la retirada de las tuberías de la red de saneamiento que pasan bajo la arena, así como la canalización de las aguas pluviales, una actuación que estaba previsto acometer antes del verano, aunque no hay garantías de que finalmente vaya a ser así.