El ejecutivo pobrense endurece el control sobre las industrias para mejorar la protección ambiental

Laura López RIBEIRA/LA VOZ.

BARBANZA

17 jun 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Hace un año que el Concello de A Pobra, en colaboración con la Xunta y Aquagest, puso en marcha los planes de vigilancia ambiental y de vertidos industriales. Una iniciativa mediante la que se estableció un protocolo de medidas que las empresas del municipio debían seguir para proteger el medio ambiente. Ayer, empresarios, representantes de Aquagest, de la Xunta y del Concello volvieron a reunirse para hacer balance. El resultado al que se llegó es que el protocolo ha surtido efecto, pero es insuficiente. Es por ello que han decidido endurecer las medidas de control y ser inflexibles ante cualquier anomalía que se registre, según declaró el regidor, Isaac Maceiras.

Al encuentro asistieron, además del alcalde, Cristina Navarro y Casimiro González, de Aquagest; Susana Fernández, de la empresa pública de Augas de Galicia Eposh; Cristian Trigo, de Idom; Pedro Fernández, de Geseco; y representantes de Escurís S.?A., Luis Escurís Batalla, Actemsa, Sálica, Congalsa y Ramón Franco.

Balance

Isaac Maceiras explicó que en este último año casi todas las industrias colaboraron con este protocolo ambiental: «As empresas fixeron as súas predepuracións, así que felicitamos a todos os industriais. Pero tamén houbo problemas puntuais, como algúns baldeos ou verteduras controladas neste último mes, e chegamos á conclusión de que temos que facer moito máis».

De todas formas, el alcalde de A Pobra quiso agradecer el esfuerzo económico y humano realizado por los empresarios locales, ya que fueron muchos los que hicieron reformas para cumplir con el protocolo ambiental y la ordenanza municipal.

Entre las medidas más inmediatas destacan las actuaciones que llevarán a cabo las firmas Luis Escurís Batalla y Actemsa. La primera va a ampliar su sistema de depuración, para lo que el Concello le concederá licencia mañana. La segunda instalará un método de separación de grasas. Además, la Xunta realizará una auditoría documental para controlar los lodos de las factorías.

Casimiro González se mostró también satisfecho con los resultados que está teniendo el protocolo: «Hemos conseguido que todas las empresas traten el tema ambiental en sus proyectos, aunque tenemos que seguir con los controles».