El número de sucesos totales se redujo en 282 con respecto al año 2009. Sin embargo, y según se apunta desde los sindicatos, esta disminución no debe atribuirse a una mejora de las condiciones laborales y de la seguridad. Los representantes de los trabajadores indican que sí se han realizado numerosas campañas en materia de prevención, pero también precisan que no debe olvidarse que el descenso, en parte, también se debe a la disminución del volumen de actividad.
Los dirigentes de las organizaciones de la comarca manifiestan que, por ejemplo, la construcción ha experimentado una recesión importante debido a la crisis, lo que ha provocado una drástica disminución de la mano de obra: «O haber máis paro hai menos accidentes», subraya el responsable barbanzano de la CIG, Xan García.
En los años precedentes, la cifra de siniestros con baja laboral ha oscilado siempre entre los 1.900 y los 1.700. En esta ocasión se han registrado 1.427 percances.