Era un pleno intrascendente. La corporación sonense debatía ayer solamente la aprobación de las actas anteriores para cerrar el actual mandato. Sin embargo, hubo polémica hasta en esta sesión que debería ser de puro trámite. Una vez más, el PP volvió a ser el protagonista, pues su portavoz, Manuel Tomé, acusó a su compañera Asunción Torres de desleal, al romper la disciplina de voto del grupo popular. Incluso anunció que tanto el como los compañeros presentes solicitarán la intervención del órgano provincial para que trate el asunto. O sea, que le abra un expediente disciplinario.
Y es que el portavoz en funciones de los populares sonenses se resiste a dejar el cargo sin dar guerra. En la última sesión del actual mandato se trató la aprobación de las dos actas anteriores que quedaban pendientes.
La polémica surgió, según Tomé, a raíz de que los grupos de la oposición «non recibimos a documentación da acta do día 6 deste mes». Este hecho provocó el enfado del popular, que acusó al bipartito de utilizar este tipo de «artimañas» con la finalidad de que la oposición no pueda hacer observaciones. «Pedimos explicacións, pero non as deron», dijo.
Sorprendida
Los populares votaron en contra de la aprobación de las dos actas, excepto Asunción Torres, que se abstuvo en una de ellas. Este hecho provocó que Tomé la acusase de romper la disciplina de voto y anunció que pondrá el hecho en conocimiento de los órganos del partido.
Por su parte, Asunción Torres e mostró sorprendida por la actitud de su compañero de partido, pues comentó que no es la primera vez que un concejal del PP rompe la disciplina de voto.
Torres indicó que esta es una estrategia más de Manuel Tomé de intentar desprestigiar la imagen de los que continuarán en la próxima corporación. «Está moi amolado porque eu seguirei de concelleira e el non». Por último, quitó importancia a lo sucedido y comentó que es una rabieta más del hasta ahora portavoz del PP.