Entre los meses de mayo y junio, el desempleo ha descendido en más de medio millar de personas en la comarca. No es que la situación económica haya mejorado, sino que el inicio de la temporada estival propicia el aumento de las contrataciones. Se trata de empleos que alivian las economías de muchas familias, pero que no constituyen más que un parche de carácter temporal. Lo bueno es que la industria sigue con su buena salud.