Comenzaron los trabajos para la instalación de una gran carpa de 900 metros sobre el dolmen de Dombate
CARBALLO
Los operarios de la empresa coristanquesa Carpas Facal comenzaron ayer con los trabajos que permitirán cubrir, en menos de una semana, el dolmen de Dombate.
Sobre el megalito y la actual lona se colocará una gran carpa de 900 metros cuadrados (un cuadrado de 30 metros de lado), a ocho metros de altura y caída a dos aguas. Es de color blanco, tiene protecciones de PVC y la estructura y los soportes son de aluminio. Pese a su aparente fragilidad, gracias a su resistencia está preparada para soportar rachas de viento de más de cien kilómetros por hora.
Un responsable de la empresa explicó que ayer comenzó el ensamblaje de las diversas piezas de la carpa. El montaje in situ se desarrollará hoy (eran las previsiones de ayer a media tarde), ayudados por una grúa de grandes dimensiones. «Aquí temos que traballar case no aire», explicaba el empresario coristanqués, dando a entender que las precauciones que tienen que tomar son muchas, y en todo momento estos trabajos están supervisados por un arqueólogo.
El cuidado debe ser extremo, ya que las obras no pueden dañar los más mínimo ni al dolmen ni a la estructura existente, y que más tarde se retirará. De hecho, lo más seguro es que los viejos plásticos se retiren la semana que viene.
También esta nueva carpa tiene carácter provisional, y durará solo el tiempo necesario hasta que se consolide la intervención y la rehabilitación del famoso megalito emplazado en el municipio de Cabana.