Desde hace algunas semanas en los escaparates de los comercios de la comarca se pueden observar carteles anunciando descuentos en toda clase de productos. Una imagen que refleja bien a las claras que el 2008 no es un año cualquiera, es el año de la crisis. Los vendedores intentan reaccionar ante la falta de clientes y adelantan los descuentos y las promociones al período de las rebajas. Por su parte, los compradores comprueban que pueden realizar adquisiciones con la misma calidad que hace tan solo unos días, pero, de media, un 20% más baratas.
Los comerciantes pretenden conseguir con esta medida incentivar las ventas y conseguir deshacerse de los productos de temporada a un buen precio, ya que las rebajas se empezarán con descuentos de, por lo menos, un 40%. Es una manera de solucionar la campaña que hasta el momento no marcha por buen camino.
Los establecimientos que se dedican a la venta de calzado son los que por el momento utilizan más este reclamo, aunque algunos empresarios reconocían que era la primera vez en su vida que hacían descuentos. «Yo es la primera vez que lo veo, pero tal y como están las cosas, algo hay que hacer», señalaba la responsable de una tienda, quien añadía: «hay que subirse al carro, si los demás lo hacen, tú no te puedes quedar atrás».
Pero los de calzados no son los únicos comercios que iniciaron en los últimos días descuentos y promociones. Estas iniciativas se pueden encontrar en negocios muy diversos como los de los vestidos de novias, donde algunas prendas se llegan a ofertar un 35% por debajo de su precio habitual, y los establecimientos que se dedican a la venta de electrodomésticos.
Sin embargo, para estos últimos los descuentos y las promociones por estas fechas no son una novedad, ya que todos los años intentan captar más clientes cuando se acerca la Navidad, una época en la que los aparatos eléctricos forman parte de la cesta de los regalo.
En otros lugares de Galicia, los comerciantes han solicitado que se retrasen, sobre todo, las rebajas de verano para que de esta forma los negocios sean capaces de deshacerse de todo los productos de temporada. En algunas partes de España ya se ha tomado esta medida.