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El Camiño genera un negocio cercano al millón de euros al año

La Voz

CARBALLO

17 mar 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

El Camiño Xacobeo de Fisterra y Muxía se ha consolidado como una fuente de ingresos para la empresas de la Costa da Morte. Desde que se empezó a contabilizar el flujo de peregrinos en Fisterra, en 1997, llegaron a la localidad, caminando y en bicicleta -y algunos a caballo- un total de 71.912 peregrinos.

La cifra no dejó de crecer de año en año -salvo excepciones- hasta llegar a los 11.469 peregrinos registrados en Fisterra el año pasado. Este año, en función del número de caminantes que llegaron a la localidad desde enero, parece que las cuentas serán parecidas.

Desde el albergue de Fisterra estiman que el gasto medio de un peregrino a su paso por la comarca está en torno a los 25 euros al día. Para llegar de Santiago a Fisterra el tiempo medio estimado es de tres días, aunque puede prolongarse hasta cuatro si el caminante decide al final desviarse hasta Muxía. Aunque los gastos dependen mucho de cada personas, la mayor parte de los caminantes reducen sus inversiones a un desayuno en el lugar en el que duermen, un menú del día -en torno a 10 euros- en alguno de los restaurantes de la ruta, unos 5 euros en consumiciones en cafeterías y gastos de farmacia y 3 euros más por la pernocta en los albergues de la red pública. A eso se le suman otras pequeñas cantidades como puede ser, explican desde Fisterra, conexiones a Internet. En total, unos 25 euros, 75 para los tres días de la ruta.

Así, las cuentas ascienden a cerca de 850.000 euros, pero hay que sumar una cantidad mayor a la cifra final porque en torno al 50% de los que llegan a Fisterra no encuentra sitio en los albergues y duerme en establecimientos privados cuyas tarifas no bajan de los 7 euros por noche. Así, en números redondos, los peregrinos dejan cada año en la comarca en torno a 1 millón de euros y generan cerca de una veintena de empleos directos entre albergues públicos, privados, restaurantes del Camiño y otros servicios. Hay que sumar también los puestos indirectos, especialmente en hostelería, mantenidos en parte por la afluencia de caminantes.

A la cifra de negocio anual hay que sumarle los gastos de transporte, ya que la mayoría de los más de 11.000 caminantes al año vuelven en autobús a Santiago. Además, el Camiño sirve como escaparate y un porcentaje importante regresa después a visitar la zona.