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Los pescaderos de la plaza de abastos carballesa se rebelan contra las restricciones de agua

La Voz CARBALLO/LA VOZ.

CARBALLO

16 jun 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Uno de los problemas que ha tenido desde siempre la plaza de abastos de Carballo es la filtración de agua de la planta baja al sótano. Hasta ahora no pasaba nada, pero desde que el mercado provisional está prácticamente terminado era un problema que siguiese lloviendo . Para evitarlo, los técnicos responsables de la obra de reforma propusieron que se dejase de baldear el suelo. Así se planteó a los comerciantes, pero los pescaderos aseguran que las restricciones fueron más allá, y se rebelaron por entender que sus puestos necesitan una limpieza especial dado el tipo de mercancía que manejan.

Las diferencias comenzaron el viernes. «Chegamos e non había auga, e a billa que tiñamos o xoves na esquina xa non estaba», señaló una de las afectadas. Ese mismo día visitó el mercado un veterinario del servicio de salud pública, que, después de comprobar los problemas de humedad del sótano, pidió a los pescaderos que evitasen baldear y que utilizasen fregonas para limpiar el suelo, al tiempo que solicitó a los encargados de la obra que instalasen un grifo en la parte exterior del edificio para evitar que los comerciantes tuviesen que cargar cubos de agua desde el baño.

Las dificultades continuaron el sábado, y ayer, cuando los pescaderos llegaron al mercado, se encontraron con que habían sido retirados los grifos. «¿Quen son eles para meterse no meu posto?», criticaba una de las afectadas, al tiempo que denunciaba que en el resto de los puestos seguía habiendo agua. Por su parte, los técnicos aseguraron que se pidió la colaboración de los placeros para evitar las filtraciones, pero que siguieron baldeando, por lo que resultaba imposible terminar la instalación del falso techo, y que la decisión de cortar el agua se tomó de acuerdo con el servicio de veterinarios de salud pública.

Solución provisional

La tensión alcanzó ayer su grado máximo, pero a última hora de la mañana, tras la visita a las pescaderías tanto de la dirección de obra como de representantes de la empresa y del Concello de Carballo, se alcanzó un principio de acuerdo, que pasa por la instalación de un grifo en el exterior del edificio. «Hoxe -por ayer- xa limpamos todo con trapos e fregonas, e a auga dos cubos foise tirar fóra», apuntó una de las pescaderas, que confían en que hoy ya esté disponible ese nuevo punto de suministro.