Una clase de geografía e historia con el alcalde Evencio Ferrero

Patricia Blanco
Patricia Blanco CARBALLO/LA VOZ.

CARBALLO

21 sep 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El instituto Alfredo Brañas de Carballo cumplirá en el presente curso cuarenta años de funcionamiento. Se conmemorará esta efeméride con diferentes actos y el primero de ellos, tal y como resaltó ayer la vicedirectora del centro, María Díaz Marzoa, ha sido la conferencia inaugural a cargo del alcalde de Carballo, Evencio Ferrero. Ella se encargó de introducir la intervención del regidor y lo calificó como «personaxe central da vida política e da sociedade carballesa». Enumeró algunas de las entidades de la que es miembro activo y recordó además que el alcalde forma parte del claustro de profesores del propio instituto.

Ferrero ofreció ayer una amena charla. Cuarenta minutos de palabras que lograron parecerse a una clase de geografía e historia. Por supuesto, con Carballo como tema central. Demografía y etnografía también entraron en su conferencia. Ferrero arrancó declarándose «tremendamente orgulloso de ser alcalde de todos os carballeses» y se aventuró a citar otros que podrían haber sido los encargados de dar comienzo a este curso. Pero él fue el seleccionado y se lo tomó con ganas. Habló de las páginas escritas sobre la capital de Bergantiños y de todas aquellas que -les tiró la pelota a su tejado- habrían de escribir algunos de los chicos que lo escuchaban (tercero de ESO, cuarto y cursos superiores también).

El Río Anllóns o los Baños Vellos, como referentes de articulación, pasaron por su discurso, al igual que fotografías y mapas que hicieron más atractivas sus palabras. «Carballo sempre tivo un forte sentido de pertenza comarcal», aseguró, además de constante vocación de capital comarcal y, la comarca en sí, consideró y dijo, es una de las que tienen mayor personalidad etnográfica de toda Galicia.

Recordó a los miles de carballeses que figuran como «residentes ausentes», se paseó por la inmensa cantidad de personas que tuvieron que emigrar y explicó el crecimiento de Carballo y sus aledaños a lo largo del tiempo, ese camino emprendido desde finales de los sesenta hacia la pequeña ciudad que es hoy. Habló de un «novo rol» para la villa y de una línea de continuidad apetecible: la de continuar siendo un motor de crecimiento territorial, «deixando de vivir de costas ao mar».

De sus gentes habló también y del alto nivel de implicación del que siempre hicieron gala, «un importante activo». Destruyendo valados y dejando a un lado los localismos, se pueden cumplir muchos sueños. Citó a Martin Luther King para finalizar su conferencia de apertura del nuevo curso y para hablar de los posibles deseos. «Podemos soñar logo cunha autovía gratuíta e con ser atendidos nun hospital comarcal en Carballo». Vítores, aplausos y alguna pregunta cerraron su intervención.