Para Juan Carlos Díaz del Valle, psiquiatra del Chuac y coordinador de las jornadas que se celebrarán mañana en Carballo, destaca el papel crucial de las familias, que muchas veces «sufren en silencio» el problema. «Un 85% de los pacientes están en manos de la familia todo el día, lo que provoca el síndrome del cuidador. Por eso en los centros de rehabilitación hay estrategias orientadas a las familias, pero también hay que intentar que abran más centros de día y residencias y favorecer el respiro familiar», dice.
Pero las reinvidicaciones de Díaz del Valle van más allá. Explica que los pacientes con trastorno mental severo suelen tener muchos problemas físicos a los que no siempre se presta el cuidado preciso, algo que podrían paliar, por ejemplo, los programas de atención sanitaria conjunta.
En estos momentos, los recursos públicos incluyen una unidad de hospitalización y un centro de día en A Coruña, las unidades de salud mental de Cee, Betanzos, Carballo, Ventorrillo, Abente y Lago, Elviña y Cambre, y convenios con entidades como la Asociación de Ex Alcohólicos, las unidades de drogodependencias de A Coruña y Carballo y APEM. Pero «tenemos carencia de recursos asistenciales», lamenta Juan Carlos Díaz, cuya máxima es que, cuando se trata de salud, «hay que darle más a quien más lo necesita».