La residencia que gestiona la empresa Geriatros funciona ya con una veintena de usuarios que disfrutan de unas instalaciones modernas y con muchos servicios
28 nov 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Por fuera, el geriátrico de Vimianzo es de sobra conocido por todo aquel que tenga que pasar por la localidad a través de la AC-552. Mucho se ha hablado sobre el edificio y muchas imágenes se han publicado del exterior del inmueble. Ahora, después de cerca de tres años, también es posible conocerlo por dentro.
Sorprende por sus dimensiones y por su número de servicios. Todavía da una sensación algo fría, con todo nuevo, reluciente, con cosas todavía empaquetadas y con una sensación de vacío que se irá reduciendo a medida que vayan llegando trabajadores y usuarios.
Por las instalaciones hace de guía quien seguramente mejor conoce el edificio vimiancés, Sandra Fernández, la directora, que amablemente va desgranando las claves de los servicios, que no son pocos.
La residencia puede atender hasta 150 personas. Esta semana eran unas 20 las que estaban allí, pero el número irá creciendo poco a poco. Desde Geriatros cuentan con acabar el año con unos 80 residentes.
Por ahora tampoco hay mucho personal, algunas gerocultoras, una médica, profesionales de cocina, limpieza y mantenimiento, recepción y trabajadora social. Serán más a medida que lleguen más residentes.
Dentro la sensación de amplitud y desahogo es total. La última planta, destinada solo a habitaciones, tiene todo el aspecto de un hotel de mediana categoría, con unos cuartos -los hay dobles e individuales- que cuentan con baño adaptado y unas espléndidas vistas al valle de Vimianzo. En la planta inmediatamente inferior también hay habitaciones -es la que se está utilizando en estos momentos- además de otros servicios.
El inmueble está lleno de tranquilas salas de estar y de espacios diferenciados para personas con distintas características, según su grado de discapacidad. Los que están allí estos días lo están estrenando y tienen mucho que inaugurar. Faltan cosas, pero hasta conexión a Internet tendrán en una sala los que más se apliquen a las nuevas tecnologías.