De nuevo, los tribunales se pronuncian sobre dos inmuebles de Fisterra. El Concello está en trámite de legalizarlos, pero llama la atención la gran cantidad de intervenciones judiciales practicadas en la Costa da Morte durante la fiebre del ladrillo, lo que significa que, en general, se han hecho las cosas mal. Esta es una buena lección para el futuro.