El Calvo cumplió los pronósticos frente al Boya

José Manuel Ferreiro Negreira
José m. ferreiro CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

18 dic 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El Calvo Xiria cumplió los pronósticos ante el Conservas Boya (38-25) en el derbi de la Costa da Morte de Primera División Nacional de balonmano. Los anfitriones basaron su juego en la solidez defensiva y en una mayor efectividad en ataque. Por su parte, los camariñáns estuvieron en el partido hasta la primera parte. Después, la diferencia fue creciendo de los 8 tantos hasta los 13 finales.

Calvo Xiria: Yago (Quique y Naya); Pablo (14, 3p), Jesús (1), Manu (1), Dubra (5), Álex García (2), David (3) -inicial- Ramón (2), Miguel (4), Sergio (4), Álex Zas (1) y Ángel (1).

Conservas Boya: Víctor (Cristian); Borja (8, 2p), Moncho (1), José Ramón (2), Fari (1), Catalán (7, 2p), Xabi -equipo inicial- Perón (2), Pombo, Damián (1), Felipe (2), Cristian Antelo y Alan (1).

Árbitros: Fernando y Pedro Eiras Abalde (Galicia). Regular. Mostraron la cartulina roja al visitante Perón (min 47).

Marcador cada cinco minutos: 3-2, 7-3, 8-3, 12-6, 15-9, 19-11 (descanso), 21-14, 26-17, 28-10, 31-20, 34-23 y 38-25 (final).

Incidencias: Excelente entrada en el pabellón de la zona escolar de Carballo, con más de 350 aficionados en las gradas. Una parte importante eran seguidores del Boya llegados desde Camariñas.

El conjunto del Calvo Xiria impuso la lógica a base de un balonmano con más experiencia ante un Conservas Boya al que le costó mucho hacer gol.

Los primeros cinco minutos fueron los más igualados, y concluyeron con un ajustado 3-2. Desde ese momento, las diferencias fueron incrementándose en 4, 5, 6 y 8 goles, hasta llegar al descanso con la máxima diferencia de 9 tantos (26-17).

La defensa carballesa nunca dio facilidades a la hora de lanzar, y en cambio en ataque el Calvo siempre supo sacar la máxima rentabilidad a sus acciones. Si defensivamente el Boya tuvo errores, en ataque se apoyaron en los lanzamientos de Borja.

En la segunda parte, las diferencias comenzaron a ser más claras y el partido se decantó prácticamente a los cinco minutos. Desde ese momento, el técnico Marcos Rodríguez comenzó a mover el banquillo, al igual que hizo Jota después de mostrar la cartulina roja a Perón, que supuso cuatro minutos con un jugador menos en pista.

El Xiria demostró sus opciones de estar en el grupo de arriba y luchar por una de las dos primeras posiciones de la liga, al concluir la primera vuelta de la competición. El Conservas Boya, por su parte, en la que es su temporada de debut en la categoría, tendrá que mejorar mucho para evitar una de las plazas de descenso, uno de los objetivos marcados.