Al triángulo picassiano le falta un vértice. Dos de las tres ciudades españolas que marcaron su biografía, Barcelona y Málaga, cuentan con museos en los que se exhibe abundante obra del artista «gallego nacido en Málaga», como lo define Ángel Padín, presidente de la Asociación Pablo Picasso de A Coruña. La ciudad herculina ha montado en Payo Gómez una casa-museo, de titularidad municipal, en el piso en el que vivieron el pintor y su familia entre 1891 y 1895; está repleta de «obra falsa», como reconoce en círculos privados algún concejal, pero de puertas hacia fuera hay que decir que son «réplicas» de sus cuadros coruñeses.
Procede esta larga introducción porque, temporalmente, el triángulo se ha completado. Ayer se inauguró en la sede de la Fundación Barrié de la Maza una extraordinaria exposición que incluye 57 retratos femeninos firmados por Picasso. Las amantes, las musas de Pablo (algunas, haría falta un rascacielos para meterlas a todas), se muestran en la ciudad en la que conoció el amor.
La anterior gran exposición dedicada al autor de Guernica en A Coruña, Picasso joven , también en la Barrié, se frenaba justo antes de su llegada al cubismo, en 1907. Cuatro años y medio después la clausura de aquella muestra nos llega una segunda parte. Los cuadros y dibujos incluidos en Picasso. Laboratorio de estilos están datados entre 1919 y el año anterior a su muerte, 1972.
De vuelta en la ciudad
Marta Rey, directora de la Fundación Barrié de la Maza, dijo en el acto de inauguración de ayer que con esta exposición la entidad «devuelve a Picasso a la ciudad donde expuso por primera vez y en la que empezó su formación académica y como dibujante». Es también la ciudad en la que su maestro Brocos le abrió las puertas al expresionismo y en la que murió su hermana Conchita, lo que, sostienen algunos expertos, marcó sus relaciones futuras con las mujeres. Sentenció Rey que con esta muestra de retratos «rotundos y bellísimos» A Coruña «queda consagrada entre el grupo de ciudades íntimamente ligadas a Picasso». Así será hasta el 3 de febrero, que es cuando se cierra la muestra. La directora de la Barrié agradeció «la generosidad y la amistad» de «la coleccionista particular» que ha cedido todos los cuadros.
María Teresa Ocaña, asesora científica de la exposición, elogió «la magnífica selección de obras, que nos permiten ver la evolución del pintor que ha marcado casi todo el arte del siglo XX». «A Coruña y Vigo tienen un regalazo», resumió. Y es que la otra sede de la muestra Picasso. Laboratorio de estilos es la ciudad olívica , en la que se muestran 32 bodegones.
En A Coruña son 57 las obras que se muestran en el Cantón, en la Fundación Barrié. A 400 metros de este edificio está la casa-museo de Payo Gómez. Por unos meses, 400 metros separan al Picasso verdadero del falso.