Vega confiesa que vive ajena a las peripecias de la academia. «Es que le cogí tanta tirria a Operación Triunfo que ya no lo vi más». Según ella, el programa no hace sino anular la creatividad del artista: «En aquellas horribles galas que estaba todo programado al milímetro, no te dejaban aportar nada».
Entonces, ¿qué pintaba allí una compositora como ella? «Aproveché una oportunidad. Si eres listo, te da una cuota de pantalla que ninguna discográfica te puede pagar». Esa fue la parte buena, la mala la comprobó en cuando llegó su éxito: «Nos hicieron grabar un single. Si vendías 200.000 copias de él te grababan un disco como si fuera un premio. Y no: te grababan un disco porque les iba a ser rentable. A mí me dieron un tema y dije que no, que quería meter uno propio».
Cuando llegó el momento de hablar del álbum, fue cuando la cantante dio el portazo definitivo: «Lo que me ofrecieron fue un disco que poco más y me muero: todo en plan latino con diez bailarines detrás. Te eligen todo. No hay opción a cambiar nada, solo a decir que no». Y lo hizo: por ello su disco de debut salió cuatro meses después que el de sus compañeros de la Academia. ¿Arrepentida? «Para nada».
Encima de Kournikova
El número especial de la revista FHM titulado Las 100 mujeres más sexys del mundo ha incluido a Vega en el puesto 98, un peldaño por encima de Anna Kournikova. «No me agrada salir en esas revistas porque yo no vendo una imagen de sex symbol », confiesa. Ya salió en la misma lista hace dos años: «Entonces fui la 92, se ve que con los años empeoré», bromea. Opta por tomárselo con humor: «Le decía a mi hermana: 'Mira, estoy por encima de Tyra Banks'. Eso, el que yo esté ahí, delante de una supermodelo, ya puede dar una idea de lo absurdo que es todo esto».