Veira, que hoy cumple 65 años, pide a los políticos «que sean más servidores de lo público que de los medios»
24 jun 2008 . Actualizado a las 11:54 h.Hay gente que sueña con su jubilación. Otros la temen por el miedo a no saber qué hacer. Carlos Veira Penoucos (A Coruña, 1943) cumple hoy 65 años y pasa a la reserva con una mueca irónica, la misma que le ha acompañado a lo largo de su dilatada carrera profesional, y una mirada optimista al futuro. Casado con Pilar, padre de cuatro hijos y abuelo de Ignacio, de solo seis meses, que será uno de sus grandes pasatiempos, a Carlos le espera un homenaje este jueves, en el restaurante del mirador de San Pedro. Y en septiembre, un viaje a Jordania, a conocer Petra. «¿Luego? Ya veremos. Yo soy de los que cree que no conviene hacer planes cuando uno se jubila», cuenta este periodista que ejerce de coruñés de la Pescadería y apasionado de la música, que sigue cantando en el coro Madrigalia tras dirigir al grupo del Casino.
-Me han dicho que acabará un par de libros ahora que tiene más tiempo.
-Yo escribo para mí más que pensando en hacer un libro para que alguien me lo publique. Pero sí, estoy recopilando algunos gazapos y también un análisis de los medios de comunicación. Pero repito que escribo sin compromiso.
-¿Qué se lleva del periodismo?
-He tenido la suerte de ejercer en los dos lados de la profesión. Primero, hice calle en Madrid, en el Ya de la dictadura, donde burlar algunas normas era un aliciente, y luego ya en A Coruña. Desde 1986 hasta hoy estuve en la Delegación del Gobierno. En esta segunda etapa, me he dado cuenta de muchos errores de la primera. Por ejemplo, que los periodistas de calle no leen o que todo el proceso se ha industrializado y que son las empresas las que dan la imagen final del producto.
-En el fondo, es lo mismo que ocurre con los jefes de prensa de instituciones públicas.
-Ya, pero ahí no soy yo el que dice, sino que lo hace una institución. Y al político no se le puede decir que no diga lo que quiere decir.
-¿Se lleva algún secreto?
-No soy ni he sido portavoz personal de nadie y creo en la lealtad a las empresas, por lo que yo diría que no tengo nada que contar.
-¿Y deja algún consejo?
-Por mi experiencia, creo que los periodistas tienen poca independencia, pero los políticos aún menos. Les recomendaría a estos últimos que fueran más servidores de las cuestiones públicas y mucho menos de los medios de comunicación. La agenda no la pueden marcar desde los medios.
-¿Qué le diría a los periodistas?
-Que disfruten de su profesión, pero que la vida es algo más que el periodismo, que no deja de ser un medio para ganarse la vida y que intenten hacer las cosas lo más honestamente que puedan.