Sara Atán y Lucía Rolle han tocado en festivales que resaltaban la condición femenina dentro de la música
03 dic 2008 . Actualizado a las 11:56 h.«Yo nunca tuve ningún problema por ser mujer», comenta Sara Atán, la vocalista coruñesa de Nadadora, algo extrañada de que se acuda a ella para preguntar por la posición de la mujer en el mundo del pop. Con Lucía Rolle, la persona que se esconde bajo la careta artística de Sevigny, ocurre un poco lo mismo: «No creo que sea la persona. A mí la verdad es nunca me han discriminado, ni nada de eso que se dice».
Sea como sea, ambas han participado recientemente en dos festivales donde se resaltaba la condición de mujer. Por un lado, Nadadora abrió el pasado sábado en Expocoruña el festival Mulleres Arte+Parte, de corte feminista y estratégicamente situado días después del Día de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer. Su intención era la de reivindicar el papel creativo de las féminas. «Yo no abandero ningún discurso feminista», confiesa la vocalista de Nadadora. «Puede que antes se le diera más importancia, pero ahora en mi ambiente hay muchísimas mujeres y no creo que nadie tenga problemas».
Lucía Rolle, que una semana antes estuvo en el cartel del Voces Femeninas de Vigo (un festival integrado exclusivamente por cantantes mujeres), también se ve lejana al discurso victimista: «Empecé sola y no viví eso del local de ensayo lleno de hombres. Luego, poco a poco, he tenido la suerte de ir conociendo personas por el camino y nunca importó que fueran hombre o mujer». Uno de ellos, Xulio Vázquez, es su actual pareja artística: «Cuando vamos de gira yo conduzco y cargo instrumentos exactamente igual que él», dice riendo.
Las pocas pegas son, sin embargo, curiosas: «Las salas muchas veces tienen un solo camerino, todo pensado en plan unisex y, claro, cuando vas con una banda en la que son mayoría de hombres, pues es un follón encontrar un lugar en donde cambiarte», comenta Sara. Todo es cuestión de mayorías: «En el festival Vigo -recuerda Lucía- el raro era Xulio en medio de en un camerino lleno de maquillajes y todas la nuestras cosas. Ese ambiente es que al ayuda también a romper todos los prejuicios».
El grupo de Gijón Nosoträsh, completamente formado por mujeres, comentaban que con los técnicos de sonido de las salas surgía de cuando en cuando la chispa. Al mencionarlo, Lucía encuentra en su memoria: «Sí, sí. Cierto personajillo coruñés me vio coger la guitarra en una prueba de sonido y me dijo 'Anda, pero sabes enchufarla'. En fin».
Lo que queda claro es que, sexo al margen, ambos proyectos gozan de una salud envidiable. Sevigny prepara temas para un próximo lanzamiento «muy especial» rodeando de un aura de secreto. Nadadora, que ayer se encontraba grabando un videoclip en Vigo, avista para la próxima primavera la grabación del que será su tercer álbum.