Coincidiendo con la celebración de las fiestas de Santiago Apóstol de Arteixo, ayer tuvo lugar una concentración de motocicletas clásicas, a la que se apuntaron decenas de personas, que no dudaron en lucir sus vehículos. Además de vespas y sidecares, también se pudieron ver cuidados modelos con varias décadas de antigüedad, pero que seguían funcionando correctamente como el primer día que encendieron su motor.