Puerto y Ayuntamiento acuerdan prolongar el párking, una plaza y terrazas en el Parrote
A CORUÑA
La comisión mixta propone trasladar a los muelles de Batería y Calvo Sotelo el aprovechamiento comercial que no se ejecute
23 sep 2010 . Actualizado a las 15:20 h.La comisión de trabajo para el análisis de las alternativas para el aparcamiento del Parrote -integrada por miembros de la Autoridad Portuaria y el Ayuntamiento con el asesoramiento del arquitecto Luis Collarte- selló ayer un acuerdo que supondría, si la Dirección Xeral de Patrimonio da su respaldo, la construcción de un aparcamiento subterráneo con 530 plazas, la conservación del baluarte y un aprovechamiento hostelero y de ocio en un único inmueble. El presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Losada, indicó ayer que se trata de una propuesta, no un proyecto de ejecución, y destacó que está «refrendada por el arqueólogo municipal».
El nuevo diseño para la zona supone dejar un área verde en la zona más próxima a la Marina y donde se sitúan los restos arqueológicos que podrán ser observados en superficie. En el espacio donde en el pasado estuvo el área de aparcamiento de autocares se proyecta una construcción, a distintas alturas. Desde el Parrote la imagen que se ofrece es la de un gran mirador o plaza, que ocultaría en su interior el uso comercial, que se especifica que estaría destinado a locales de ocio y hostelería. Las plataformas a dos alturas permitirían, explicó Collarte, salvar la distinta cota desde el Parrote al paseo marítimo y se situarían bajo la rasante, lo que evitaría que supusiera una barrera visual. «Es una solución minimalista, para lograr un menor impacto», explicó el arquitecto que asesoró a los técnicos.
Desde esta edificación se plantea que se observe la solución que decida Patrimonio para el baluarte. El presidente del Puerto incidió, a la hora de explicar la propuesta dada para la muralla, que «son una cimentación, como una zapata de un edificio actual» y matizó que «con independencia de las cuestiones personales, no se cuestiona o no su valor».
Respecto a las alternativas que se barajan para «poner en valor» los restos, matizó que ya que la Xunta rechaza un posible traslado, se apuesta por un recrecimiento en conexión o en proyección. El director del Puerto, Enrique Maciñeira, explicó que el arqueólogo municipal defiende el último, que supondría tapar los hallazgos y reproducir lo que hubiera sido el baluarte a una cota superior. Avalando esa propuesta, Maciñeira destacó que «la mayor parte de los restos arqueológicos una vez estudiados y evaluados si no hay una puesta en valor se entierran, y eso es lo que se hace en la mayor parte del mundo». «Aquí la forma de revalorizar podría ser construir lo que nunca se llegó a hacer», explicó, ya que los restos aparecidos durante las labores de excavación y que provocaron que las obras del párking lleven paralizadas dos años son parte de una muralla que nunca se llegó a ejecutar. Collarte reconoció que supone una solución, además, «más barata». Apuntó que es un problema añadido que se sitúen bajo la cota de agua, lo que impide buscar una solución de musealización como área visitable o acristalada.
La zona de aparcamiento, para conseguir no perder un número significativo de plazas que no haga rentable la concesión, aprobada en su día con 547 plazas, se amplía hacia las instalaciones de la Solana y por debajo del vial que conduce al castillo de San Antón, ahora cerrado al tráfico. El subterráneo, tal como estaba previsto en el proyecto inicial, contará con dos sótanos. Asimismo, se plantea dar continuidad a la calle Tabernas por el lateral de la Solana para mejorar el tránsito en la zona.
«No cerrado al 100%»
Losada matizó que «no se prevé ningún tipo de compensación» a la concesionaria del aparcamiento, Copasa, más allá de la prevista con la explotación del aparcamiento y el aprovechamiento lucrativo de los locales de la construcción proyectada. «La idea es no abonar nada. La Autoridad Portuaria no podría compensar», explicó, y matizó que «la problemática suscitada por la rentabilidad de la concesión se tiene que solucionar en estos momentos».
Eso significaría que Copasa, con la que se asegura que todavía no «está cerrado al 100% el tema», tendría que asumir el sobrecoste de la obra, que se inició hace 1.272 días, con la concesión del párking y el aprovechamiento de una construcción con una edificabilidad de 2.400 metros cuadrados. El Plan Especial del Puerto contempla unos 3.000 metros cuadrados de uso terciario, y lo que no se ejecute en el Parrote, según se acordó ayer con el Ayuntamiento, podría trasladarse a los muelles de Batería y Calvo Sotelo.
Losada reconoció que no se atreve a «aventurar ningún plazo» ni presupuesto para ejecutar esta propuesta, que refrendaron los técnicos de las dos administraciones en el día en el que concluía el período para llegar a un acuerdo. Esta «idea», si es respaldada por la Xunta, pondría fin a la polémica entre las dos administraciones por el retraso en lograr una solución para una zona emblemática y que estuvo precedida por un proyecto previo del Puerto, que se rechazó al cuestionarse el aprovechamiento de la edificabilidad en varios inmuebles comerciales.