Las dos versiones de las obras nocturnas de General Sanjurjo

María Vidal Míguez
María Vidal A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Lareo: «Se trabaja de noche porque de día sería un caos total»

20 ene 2011 . Actualizado a las 14:49 h.

Llevan seis noches sin pegar ojo y reconocen que ya no pueden más. Los ruidos producidos por las obras de pavimentación en General Sanjurjo impiden que puedan conciliar el sueño, y algunos vecinos aseguran que el no descansar les está afectando durante el día. Rosario Suero, vecina del número 116 de la calle, señala que sus hijos, de 9 y 16 años, «llegan del colegio y no quieren ni comer, se van a directamente a la cama». Se levantan a las siete y media de la mañana, cuando los obreros finalizan su jornada. Ella tampoco lo lleva bien. «Estoy fatal, y cuando me levanto por las mañanas tengo que ir a trabajar. No me puedo quitar el ruido de la cabeza». Cuenta que sus compañeras del trabajo entienden cómo se siente después de ver por televisión la situación. «Nuestras habitaciones dan al exterior, y de verdad es terrorífico. Es como si tuviéramos el ruido en casa».

Mari Carmen Más, vecina del tercer piso del mismo inmueble, relata que la noche del pasado lunes fue «horrible». «La gente se asomaba a las ventanas pero no había nada que hacer». Y añade. «Se puede dormir pero tuvimos que ponernos tapones». En el piso de abajo, Gonzalo insiste en que los ruidos «me molestan muchísimo». En la calle de la Merced, algunos vecinos también manifestaron su malestar por los ruidos, que según denuncian, se oyen desde sus casas.

Desde ayer, los residentes que viven entre los Castros y ronda de Outeiro ya duermen tranquilos. El encargado de la obra confirmó que los trabajos de fresado y asfaltado ya han concluido en este tramo, y que trabajan en el siguiente, de ronda de Outeiro a Cuatro Caminos, que si «no hay ningún contratiempo y no llueve podía estar finalizado el próximo martes». Precisamente en este tramo, y como consecuencia de los trabajos, los obreros han levantado unos metros de la acera en General Sanjurjo que habían colocado recientemente. El encargado de la obra asegura que si fuera por ellos, «trabajaríamos de noche».

No había opción

El concejal de Infraestructuras, Esteban Lareo, comprende el malestar de los vecinos, al mismo tiempo que señala que «si hiciéramos las obras de día el caos sería total». «Habría que cerrar las entradas y salidas de los garajes, habría que cambiar las líneas de los autobuses, interrumpiríamos el servicio de carga y descarga y el transporte escolar». Lareo recalca que «hay que pensar que es por el bien de todos y que van a pasar años hasta que estos vecinos tengan que volver a pasar por lo mismo. A mediados de febrero van a poder disfrutar de la calle asfaltada y renovada».

El concejal de Infraestructuras reconoce que las obras generan molestias, «pero hay que aguantar. No es agradable, pero tampoco había más posibilidades». Alega que por esta situación ya han pasado los vecinos de Panaderas, plaza de España, avenida de Finisterre o que incluso en la avenida de La Marina los trabajos se tuvieron que realizar de noche mientras los locales de hostelería estaban abiertos».

Una vecina: «Mis hijos llegan del colegio y se van directamente a la cama; ni comen»