Un desahucio obliga a cerrar la cafetería Kirs a primeros de julio

alberto mahía A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Diferencias con la renta -pagaban 3.000 euros-, originaron el cese

06 jun 2011 . Actualizado a las 14:30 h.

La cafetería Kirs está a 18 días de cerrar sus puertas. Será para siempre. No por falta de clientes, que de eso siempre anduvieron sobrados. Lo que determinó su (mala) suerte fue una sentencia de desahucio que llegó tras años de pleitos entre los dos propietarios del establecimiento, que estaban en régimen de alquiler, y el del edificio. Al final, la balanza se inclinó del lado del casero y los inquilinos tienen hasta el 1 de julio para abandonar el negocio.

En la calle quedarán 15 personas. Y lo peor es que solo recibirán una indemnización de 20 días por año trabajado, pues así es la ley laboral cuando un desahucio se cruza en el camino de una empresa. Sobra explicar que los trabajadores andan con el ánimo por los suelos. «Estamos trabajando con mucha tristeza. El que más y el que menos lleva aquí más de 20 años», comentaba ayer uno de los empleados.

El principio del fin se cocinó hace unos años, cuando una parte de la sociedad quiso subrogar la hipoteca. Luego el problema fue la renta, que había que adecuar a los precios actuales de la zona, pues apenas se pagaban 3.000 euros al mes, cantidad ridícula para un local que da a la calle Real y a la Marina. Y por si fuera poco, los enfrentamientos entre los socios, que llegaron a cruzarse denuncias de todo tipo. La suma de todo ello originó el cierre, que por cierto, nunca tuvo licencia de ídem, 30 años después de su apertura.

La propietaria del edificio es la familia Obanza, que se lo adquirió a Marcial de Adalid en 1884. El primer negocio fue la Farmacia Europa. Luego vendría la mercería Alexandre, el café concierto María Fernando -donde llegó a actuar Antonio Machín-, la camisería Morán y Kirs. ¿Y ahora qué? A oídos de los trabajadores llegó un rumor de que «un comerciante chino ofreció 7.000 euros de renta y le dijeron que no». Nada se sabe de lo que abrirá luego, según los trabajadores, que ya han descartado un traslado a otro local. «Ahora al paro y a buscar cosas»...