Más de 8.000 personas asistieron al recital de la cantante de Boimorto, en el que cantó temas de todas su épocas
16 ago 2011 . Actualizado a las 10:45 h.A Coruña volvió a ponerse a los pies de Luz Casal. La cantante de Boimorto llevaba sin actuar en la ciudad desde el 2008. Había ganas, muchas ganas de verla. Y volvió a engatusar. Con su presencia, su repertorio, pero sobre todo con su voz, la que entre desgarro, lirismo y épica moldeó durante casi dos horas un puñado de canciones que ya son parte de la historia del pop nacional.
Ante más de 8.000 personas (algunas de las cuales lucían un lazo rosa, símbolo del apoyo en la lucha contra el cáncer de mama), arrancó imponente y a ritmo de bolero con Mar y Cielo. Le sirvieron unos segundos para tener al público comiendo de su mano. Respaldada por una banda excepcional, la artista convirtió la plaza en el mejor de los teatros posibles, haciendo desfilar un primer tramo de piezas de tono suave y detallista. Con mil desengaños, Entre mis recuerdos y, la primera gran ovacionada de la noche, No me importa nada pusieron las primeras notas.
Los seguidores del lado más pop de la artista tuvieron que esperar a la segunda parte del recital, cuando la artista ya había cambiado su vestido de corte romántico por unos pantalones de cuero. Inaugurado por A cada paso, llegó sin embargo a su punto álgido con dos clásicos: Loca y Rufino. La última recordó a la Luz Casal más ochentera, roquera y juvenil, despertando una enorme ovación entre el público. De ahí al final, un paseo triunfal. Y cargado de emotividad. No podría ser de otro modo con piezas como la versión de Gracias a la vida de Violeta Parra. Tampoco con No, no y no. Ni, por supuesto, con ese apoteósico final de la mano Te dejé marchar, poniéndole la piel de gallina a la audiencia, y Piensa en mí, su canción estandarte.
No fue la única actuación musical del día. En los jardines de Méndez Núñez estuvieron los integrantes de La Vieja Troba de Camagüey. Su actuación, enmarcada dentro de los conciertos de la Diputación Provincial, es ya una de las citas habituales de las fiestas, inundando de calor tropical la jornada y engatusando a los que paseaban a esas horas por allí.
La música continuará esta noche en María Pita. A las 22 horas está previsto el concierto de unos imprescindibles de la música local, Luar na Lubre, que repasarán el repertorio que los ha convertido en una referencia del folk gallego.