El poeta, abogado y editor Miguel Carlos Vidal (Ferrol, 1929), una de las más singulares voces de la lírica gallega en lengua castellana y cofundador de la emblemática revista literaria Aturuxo -publicación que fue un auténtico faro de versos en la cultura española de la posguerra-, reúne en un libro, Poesía viva , la columna vertebral de su visión sobre lo que el hecho de crear representa. Y, naturalmente, también su memoria de toda una vida dedicada a la literatura: sus recuerdos.
El volumen, que sale a la luz de la mano de Follas Novas, la editorial que dirige desde Santiago el también ferrolano Luis Alonso Girgado, lleva por subtítulo De poetas, libros, revistas y tertulias . Entre sus páginas, junto a creadores ferrolanos que forman parte del particular universo personal y literario de Vidal (Julio Pérez de Gamarra, Eduardo Santalla, los recordados Antonio Martínez Barcón y Mario Couceiro...) están desde algunas de las grandes voces vivas de la lírica atlántica, como Xulio López Valcárcel, hasta autores que ya forman parte del panteón de los clásicos, como Avilés de Taramancos, Luis Pimentel o Miguel González Garcés.
Cunqueiro
Especialmente bello es el capítulo que dedica a su amigo Álvaro Cunqueiro, en el que recuerda que su amistad con el autor de Merlín e familia , que nació a través de los lazos que a ambos los unía con Ricardo Carballo Calero, se mantuvo muy viva hasta el último día que pasó en el mundo el escritor mindoniense. «De todos los hombres del mundo, el gallego es el que más cosas sabe del lobo», le sintió decir Vidal al poeta de Mondoñedo.