El técnico leyó un comunicado de despedida sin réplica arropado por Puga, Nano y Óscar, que se marchan con él
03 jun 2009 . Actualizado a las 11:28 h.Genio y figura. Víctor García Borrás llegó al Teucro sin hacer ruido para liderar un modesto proyecto de cuatro temporadas, al que sacó un jugo impensable de antemano, y se despidió ayer con la misma serenidad. El ex técnico leyó un comunicado sin posibilidad de réplica con un tono teñido de melancolía, alivio y sobre todo cierto malestar. Dio a entender que su rabia contenida se debía a presuntos comentarios que dieron lugar a creer que arrojaba la toalla por motivos económicos.
«(...) la decisión adoptada es de índole personal con origen en el cansancio provocado por los tres años al frente del equipo y sobre todo la tempestuosa última temporada. Por tanto queremos desmentir tajantemente que nuestra decisión esté basada en cuestiones económicas», destacó con rotundidad durante la lectura del escrito.
Trece meses sin cobrar un euro
Y añadió que «de ser así, no habríamos estado 13 meses sin cobrar un solo euro del club sin elevar la más mínima protesta e incluso en muchas ocasiones dejamos de percibir nuestros salarios para que el poco dinero que entraba en el Teucro se destinara íntegramente a los jugadores».
Nunca habló de dinero
Además, quiso dejar claro que «no se tocó para nada el tema económico para la próxima temporada en ninguna de las reuniones celebradas con los nuevos interlocutores. No parece muy inteligente apuntar al tema económico como causa de esta decisión si tenemos en cuenta que la campaña que viene no habrá problemas de esa índole por la aportación de Ricardo Tilve».
Renunciar al 50% de la deuda
Pero no quedó ahí la cosa. El ex técnico de Cangas y Teucro ahondó más en el tema monetario para desvelar que «en la segunda de las reuniones mantenidas, Antonio Puga y yo, manifestamos nuestra voluntad de renunciar al 50% de la deuda que el club mantenía con nosotros. Parece por tanto evidente que esa no es la causa de nuestra decisión».
No influyó el conflicto con Coque
A continuación, recalcó que «la situación del jugador Coque Fontenla tampoco ha sido un elemento determinante de nuestra decisión, ya que en ningún momento por parte de Ricardo Tilve, Lupe Murillo o persona allegada a ellos se nos impuso, comentó ni se insinuó la disyuntiva: o él o nosotros».
Un año sabático
Pero Víctor García Borrás también volvió a repetir que su dimisión no obedece a intereses propios más allá de la necesidad de tomarse un año sabático. «A título particular, para evitar suspicacias malintencionadas, quiero dejar claro que no tengo la más mínima intención de entrenar a ningún equipo durante la próxima temporada».
En una línea similar apuntó que «entendemos que nuestra marcha no supone menoscabo al club en este momento y por tanto rogaríamos encarecidamente que se dejaran a un lado las especulaciones y se diera por zanjado el asunto. Nuestro proceder en estos tres años ha sido siempre tratar de evitar polémicas y así queremos continuar a la hora de despedirnos».
Tampoco olvidaron dejar patente su «agradecimiento a Ricardo Tilve y Lupe Murillo por su valiente paso adelante para tratar de salvar un club que se encontraba en una situación desesperada, por su confianza y por el trato que nos dieron durante estos días».
Y para concluir enviaron un caluroso abrazo a Evaristo Estévez y su junta directiva, a los entrenadores de la base, José Barreiro y Ramón Pazos, a las secretarias del club, Alicia y María, y a los medios de comunicación».