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Otro quebranto de las reglas

Juan José Crespo

DEPORTES

28 feb 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Es probable que el dopaje genético ya exista, que ya sea una realidad. Dada la evolución de las ciencias es probable que se esté desarrollando algún tipo de dopaje genético, pero no hay constancia de que pillaran a nadie, si bien sí hay sospechas. Esto ya no es ciencia ficción, pero sí es muy complicado. Forma parte ya de esta maraña que está alrededor del deportista que no tiene ningún tipo de escrúpulo y al que no le importa hacer trampas con tal de sacar beneficios. Hay gente que considera que todo aquello que no sea detectado tampoco es dopaje, por eso en este caso la lista es abierta porque está claro que va a haber sorpresas.

El dopaje genético puede inducir a cambios a nivel de resistencia en el deportista de élite. Estamos hablando de genes para inducir cambios en determinadas características de un atleta y poder favorecer la potenciación de determinadas características físicas.

Efectos secundarios

Puede significar que seguimos con la triste historia de intentar aumentar el rendimiento con métodos que no son normales, que quebrantan las reglas del juego. Además de haber dudas sobre sus resultados, no sabemos después los efectos secundarios que pudiera causar en la vida completa del deportista. Ahora se está viendo que hubo deportistas que murieron por culpa del dopaje incluso después de retirarse. Con el dopaje genéticos tales episodios están llamados no solo a repetirse sino a agravarse.

La Agencia Mundial Antidopaje, junto con varios grupos de investigación, está intentado averiguar cómo se detecta, pero el gran problema de la lucha antidopaje es que siempre vas detrás porque hasta que sabes lo que están haciendo no puede fabricar el método para detectarlo. Cuando sale a la luz una sustancia extraña, para poder detectarla tienes que saber que existe, y eso no pasa con el dopaje tradicional, porque las sustancias ya están estudiadísimas.

Juan José Crespo es especialista en medicina deportiva de la Universidad de Vigo