El Balonmán Lalín regresa mañana al Municipal, y lo hace recibiendo al Puerto Cruz San Telmo de Tenerife. El equipo que prepara Toño Gorrín visita por segunda vez la capital dezana, y lo hace en una situación diferente a la de la temporada pasada. El calendario de la Liga 2008/09 había deparado que los dos equipos disputasen su primer cara a cara en la primera jornada de Liga; en aquel entonces el Lalín se impuso por un solo gol de diferencia y en el último segundo. En ambos clubes coinciden en que este partido será diferente, puesto que el Puerto Cruz ya no parte como novato en la Liga, y además los dos equipos llegan con 9 jornadas a sus espaldas.
El conjunto tinerfeño viajará mañana vía Madrid, y lo hará con los efectivos justos. Las lesiones y los problemas de trabajo parece que harán mella en la plantilla del Puerto Cruz, y según avanzó Gorrín, tendrán las bajas de un pivote, un central, uno de sus porteros y un lateral. Jugadores veteranos y gente joven forman la plantilla del equipo tinerfeño, que mantiene el bloque de la temporada pasada reforzado con un par de jugadores más.
Momento dulce
A pesar de que el Puerto Cruz llegará a Lalín como décimo clasificado con seis puntos, podría decirse que los tinerfeños atraviesan un momento dulce, al menos, en lo que a estado anímico se refiere. Y es que el pasado fin de semana los pupilos de Toño Gorrín se impusieron 30-25 al Chapela, el líder de la tabla. El técnico del Puerto Cruz señalaba que su equipo había conseguido contrarrestar las virtudes de su rival y había merecido claramente el triunfo. Gorrín recordó que a su plantilla se le están dando mejor los equipos de la zona alta que los de los últimos puestos, y destacó el empate con el Novás, el triunfo ante la SAR, o la derrota por un gol con el Base Oviedo. En base a esto, el técnico del Puerto Cruz augura que el encuentro de mañana con el Balonmán Lalín será muy disputado. «Somos un equipo muy voluntarioso y que no da nunca el partido por perdido», subrayaba el entrenador.
A la hora de definir el balonmano del que gusta el Puerto Cruz, Toño Gorrín habla de un juego «alegre», «nos gusta un balonmano dinámico y alegre, con diferentes defensas y con una 6:0 bastante agresiva». Como hándicap, el entrenador apunta a los desplazamientos en el día, que pueden pasar factura a la frescura de la plantilla. «Salimos el sábado por la mañana, y puede pasar factura», indicaba Gorrín.
Al igual que el año pasado, el Puerto Cruz enfoca la temporada con el objetivo inicial de conseguir la permanencia en la categoría. Una vez conseguida esa meta, el conjunto tinerfeño intentaría avanzar puestos en una temporada «muy bonita porque cualquier equipo puede ganar a uno de los de arriba, y eso es lo más bonito de la Liga».