Hubo que esperar 15 jornadas de Liga para que el Balonmán Lalín consiguiera su primera victoria como equipo visitante. Los pupilos de Alberto Miguélez lograron ante el Porriño un triunfo que vale dos puntos, mucha alegría y cierta tranquilidad. El buen momento en el que concluyó el año el BM Lalín había suscitado ciertos miedos por cómo regresaría a la competición el equipo y si el descanso le pasaría factura, pero las dudas se solventaron ayer con un equipo rojinegro que dio la cara y que firmó una gran segunda mitad. Además, por primera vez en la temporada los de Lalín superaron la barrera de los cuarenta goles, ya que el partido finalizó con un amplio 33-41.
La victoria dezana se gestó en un encuentro con dos partes diferenciadas en lo que a juego se refiere. En los minutos iniciales la escuadra dezana salió enchufada y consiguió adelantarse en el marcador. Los de Alberto disfrutaron en dos ocasiones de ventajas de hasta cinco goles, pero los errores en la salida y el contraataque y algunos pases perdidos permitieron al Porriño recuperar la diferencia. Cinco minutos aciagos al final del primer parcial acabaron con el marcador 17-17 al descanso.
Gran segundo tiempo
Con la reanudación del encuentro, el Balonmán Lalín se quedó solo con lo bueno. La defensa rojinegra apretó los dientes y cortó con éxito el ataque del Porriño, mientras en las labores ofensivas Marco y Adrián se erigían en los protagonistas del choque. En ataque estático el equipo también aguantó el tirón y Bruno supo dar relevo a Martín. La defensa de Porriño no brillaba precisamente por su contundencia, y este factor permitía al BM Lalín adentrarse con cierta facilidad y también finalizar con éxito las numerosas acciones de contraataque.
Valoración del encuentro
Un ambiente de plena satisfacción era el que reinaba ayer en el Balonmán Lalín, y es que a la octava, llegó la vencida. Al BM Lalín le costó nueve encuentros el poder disfrutar de su primera victoria lejos del Municipal, y las buenas sensaciones que acompañaron la victoria, se notaban tras el partido. Alberto Miguélez reconocía que tenía cierto miedo «despois de case un mes sen xogar, pero estamos aí, na liña que deixamos antes de Nadal, e aínda que na primeira parte se puido notar algo que levabamos tempo sen competir, fíxose moi bo traballo», y eso aporta tranquilidad al equipo en el inicio del nuevo año.
El técnico subrayó que «necesitabamos xa unha vitoria fóra, e ademais gañamos con comodidade». Recordó que al equipo no le costó meterse en el partido, y aunque apuntó errores, sobre todo en la primera parte, la valoración del encuentro fue muy positiva. Miguélez destacó el trabajo de Marco y Adrián.