Tras los partidos suspendidos la semana pasada, mañana se reanuda la competición en Primera Nacional A con normalidad. El Balonmán Lalín y el Calvo Xiria se verán las caras aa las 18.30 horas en el Municipal dezano. Tanto los lalinenses como los de Carballo no pudieron disputar sus respectivos encuentros la semana pasada, por lo que mañana comprobarán cómo les ha venido el descanso. A priori, al técnico visitante, Marcos Rodríguez, no le disgustó la idea de tomarse un respiro. El equipo se está atragantando en la segunda vuelta de la Liga, y en los siete partidos que ha disputado, únicamente han conseguido sumar un punto.
Marcos Rodríguez tiene muy claro que su equipo, cuya media de edad ronda los 21 años, se ha visto arrastrado por una dinámica de derrotas a la que hasta el momento no ha conseguido poner freno, a pesar de intentarlo incluso con cambios de planteamiento en el juego. Para Rodríguez el cortar la mala racha no pasa por modificar el balonmano de su equipo, sino por el aspecto psicológico. «Nos falta convicción; nos hemos metido en una dinámica incapaz de ganar, y lo que nos falta es creernos que podemos cambiar esto».
El preparador del Xiria argumentaba su idea al recordar que «no hicimos los primeros puntos por casualidad», y añadía que la ansiedad está pasando una factura muy cara a su plantilla. «El lunes pasado hablamos, y les dije que a ver si, al contrario que el parón de Navidad, el de la semana pasada nos sienta bien».
Para la visita a Lalín, Rodríguez contará con toda la plantilla, salvo Álex y Borja, descartados ya para toda la temporada. El preparador del conjunto de Carballo quiere que su equipo «recupere la alegría de jugar», como remedio para cortar la mala racha. Respecto al encuentro ante los dezanos, Marcos Rodríguez confía en que sus pupilos no permitan al Lalín irse en el marcador y romper el partido. «Tenemos que tener tranquilidad, saber parar y saber correr, sin caer en su juego», indicó el preparador, que recordaba como una «locura» el partido de ida. Empate a 35 fue el resultado del encuentro en Carballo, en el que los locales se habían adelantado, para dar la vuelta al partido los rojinegros, y dejarse empatar en los últimos instantes.
La motivación dezana
«No sé cuál puede ser ahora la motivación del Lalín; si se plantean el partido queriendo pelear todavía por la segunda plaza, se nos pondrá difícil», valoraba ayer Marcos Rodríguez. El técnico del Calvo Xiria considera que si el BM Lalín no sale a la cancha con la urgencia de vencer, «nosotros tendremos que jugar con tranquilidad, y tendremos nuestras opciones». En cualquier caso, Rodríguez confía en que su plantilla «no se acelere demasiado».