Un año más, A Estrada y el mundillo cultural estradense celebraron ayer -en el teatro Principal- el ritual de la entrega del premio de novela García Barros, en su decimosegunda edición, ante decenas de personajes de la cultura y la sociedad local, autoridades municipales e invitados. El ganador en esta ocasión, compitiendo con otros treinta participantes, era Antón Lopo, con su obra Obediencia .
El premio, que tiene una dotación económica de 9.000 euros y la edición de la obra, fue entregado por el secretario xeral de Política Lingüística, Anxo Lorenzo, quien señaló en su intervención posterior que «é un orgullo contar no sistema literario galego co premio de novela García Barros».
Definió el galardón como un ejemplo consolidado de las iniciativas que se están desarrollando a favor de la literatura y de la lengua gallega. Reafirmó seguidamente el compromiso de la secretaría xeral con este premio literario. Por su parte, el alcalde estradense, José Antonio Dono, recordó los apoyos que recibe el premio por parte de la Xunta, Diputación, editorial Galaxia y el Concello, favoreciendo la iniciativa de impulsar la literatura escrita en gallego.
Aludió también a la figura y el ejemplo de Manuel García Barros, y utilizó también el término orgullo por tener un idioma propio con su literatura y con este premio. Editorial Galaxia presentó el libro recién publicado con la obra ganadora.
Este año, el acto cultural del García Barros incluía la actuación de un grupo de música de cámara, y una tertulia literaria que tendría lugar posteriormente en una casa de turismo rural con varios críticos literarios y ganadores del premio en años anteriores.