La Marina de aquel país comprará unos 40 buques en los próximos años
03 sep 2011 . Actualizado a las 06:00 h.El Consejo de Ministros autorizó ayer a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) a crear la primera filial de Navantia en el extranjero. Se pondrá en marcha en Australia, uno de los clientes de referencia en estos momentos para los astilleros públicos españoles, a los que contrataron en el 2007 la construcción de dos megabuques anfibios y el diseño y la transferencia de tecnología de tres destructores.
Mientras que a nivel internacional los presupuestos de Defensa han caído sustancialmente por la crisis económica, la Armada de Australia cuenta con un libro blanco en el que ha plasmado sus necesidades de renovación de la flota a medio plazo y en el que ya ha manifestado su intención de dotarse de 12 submarinos, 20 patrulleros, ocho fragatas y varias lanchas de desembarco para los barcos anfibios. La empresa pública española no quiere perder su posición como uno de los constructores navales de referencia para el Ministerio de Defensa australiano, por lo que ha decidido implantarse allí. Invertirá alrededor de 3,7 millones de euros -cinco millones de dólares australianos- en crear Navantia Australia PTY. LTD, que tendrá su domicilio social en Melbourne.
«Eficiencia operativa»
Según el Gobierno, la puesta en marcha de la nueva sociedad «se lleva a cabo por razones de eficiencia operativa, ya que facilitará a Navantia el desarrollo de la actividad derivada del contrato con la Armada australiana para el cumplimiento del diseño de los barcos y de los subcontratos de prestación de servicios». Por otro lado, aunque no es requisito exigible para la adjudicación de nuevos pedidos, la Administración del país «valora positivamente que una sociedad esté radicada en Australia para firmar contratos», por lo que la firma que dirige Luis Cacho ha optado por reforzar su presencia en este mercado.
La empresa ya cuenta con personal destinado en las ciudades de Adelaida, en donde se fabrican los tres nuevos destructores basados en las fragatas españolas F-100, y en Melbourne, en donde se finalizarán los dos megabuques anfibios que se están construyendo en estos momentos en los astilleros de la ría ferrolana.
Además, periódicamente se desplazan delegaciones de técnicos a ambas localidades para supervisar el avance de los trabajos.
Mantenimiento de los barcos
La creación de la filial en Australia se produce pocas semanas antes de que la Armada tome una decisión sobre la oferta presentada por Navantia para el mantenimiento de los nuevos barcos militares. Es un posible contrato que vincularía a ambas partes por un período estimado de 30 años y por el que la compañía española se ocuparía de mantener los navíos en plena capacidad operativa introduciéndoles todos los nuevos equipos y sistemas de última generación.
También está pendiente de firmar un pedido, ya comprometido, para la fabricación de cinco bloques para los destructores que se están construyendo en Adelaida.