Regístrate gratis y recibe en tu correo las principales noticias del día

«Ver las imágenes del accidente no nos está dejando dormir»

Vanessa Monteiro

ESPAÑA

Los familiares tratan de rehacer sus vidas en medio de la polémica por las filtraciones del vídeo del siniestro

21 sep 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

«Ver las imágenes del avión no nos deja dormir, se nos está haciendo imposible sobrellevar esto», asegura la canaria María Cabrera, que perdió a sus dos hijas y a una nieta en el accidente, e insiste: «Estamos indignados con lo que se está viendo en televisión». Ayer se cumplió un mes del trágico accidente que costó la vida a 154 personas y dejó a 18 supervivientes y a muchos familiares y allegados marcados para siempre. Los afectados intentan rehacer sus vidas entre el dolor de sus pérdidas y la polémica que suscita el tema.

La reciente filtración a varios medios de comunicación de los vídeos grabados por Aena del momento del accidente dio paso a un nuevo debate público sobre la seriedad de las investigaciones y molestó a los familiares. El portavoz de la asociación de afectados del vuelo JK5022, Federico Sosa, afirma que «la reproducción una y otra vez del vídeo está causando mucho daño, ya que es muy duro ver cómo se abrasan todos nuestros familiares».

Las víctimas solicitan a políticos y medios de comunicación que las dejen «cerrar las heridas, luego ya veremos cómo va la investigación y que paguen los culpables». Así se expresa Mari Carmen, la esposa de Rubén Santana, un pastor de la Iglesia Evangelista de Tres Cantos que falleció en el accidente. En referencia a la comisión investigadora, dice. «Debemos dejar que hagan su trabajo, debemos tenerles respeto y no atosigarlos mientras investigan, no hay que machacar a los que están intentando averiguar cómo sucedió todo. Con la caja negra se sabrá a su debido tiempo qué fue realmente lo que pasó». Mari Carmen también recuerda el último contacto con su esposo antes de la tragedia. «Mi marido me mandó un mensaje por el móvil mientras esperaban, diciendo que el avión estaba averiado y que los técnicos estaban arreglándolo. Yo le dije de broma 'vente para casa'», relata emocionada y resalta que «era muy cariñoso y siempre estaba bromeando».

Solicitud de privacidad

Algunos supervivientes piden insistentemente que se deje de informar sobre ellos. Los portavoces de Kim Ivonne, Tate Pérez, Ángeles Carpintero y María Loreto González Cabana han requerido expresamente que se deje de suministrar información sobre su estado de salud. En varios hospitales madrileños fueron ingresados durante días los 18 supervivientes, y de estos, nueve todavía permanecen en los centros.

Un mes después de la catástrofe de Barajas, el accidente sigue acaparando espacio en los medios y todavía queda mucho por saber. Las investigaciones continúan, se suceden las demandas de familiares a la compañía aérea y a los fabricantes del avión. De momento, dos familias que perdieron a sus seres queridos ya han decidido demandar al constructor aeronáutico estadounidense Boeing y a Pratt & Whitney, fabricante de algunas piezas de la aeronave siniestrada, por medio del bufete de abogados del mismo país Podhurst Orseck. Lo harán en Estados Unidos porque las indemnizaciones pueden ser mayores y es probable que a lo largo de los próximos meses otros afectados se unan a la demanda.

La cifra de 25.000 euros prometida por parte de Spanair en concepto de adelanto de las indemnizaciones que correspondería a cada familia todavía no ha llegado a manos de los afectados. Mari Carmen, esposa del fallecido Rubén Santana, señala que «a nivel económico no nos han ingresado nada todavía. Iban a adelantarlo, pero no se ha concretado. Dijeron que se haría efectivo en 15 días y aún estamos esperando».

Una vez ocurrido el siniestro se inició un verdadero calvario que para algunos duró demasiado, con el reconocimiento de los cadáveres en Ifema y en el cementerio de la Almudena, muchos días de espera en el hotel Auditorium, trámites burocráticos, funerales de Estado, visitas de líderes políticos, atención a los medios de comunicación, etcétera. Un sinfín de circunstancias que pueden hacer que el luto se prolongue aún más en el tiempo. «Yo solo quiero llevar mi dolor como cualquier persona que ha perdido a un ser querido», asegura Mari Carmen. Afirma, asimismo, que el continuo seguimiento por parte de los medios de comunicación «no ayuda en absoluto». «¿Te crees que voy a poner la televisión para destrozarme la salud? Yo intento no verla porque no me quiero quemar, ni comer el coco», añade.

Sin embargo, esta mujer entiende lo complicada y lenta que puede llegar a ser una investigación de estas características. «Son demasiados los muertos y las explicaciones, las cosas nos son de hoy para mañana», insiste.

Refiriéndose al apoyo oficial recibido durante este tiempo, la viuda del pastor de Tres Cantos asegura que «las autoridades hacen su trabajo, pero yo me siento arropada por mi familia y por mi gente».