Insiste en que dirigentes populares han sido escuchados ilegalmente, pero no aporta ni pruebas ni nombres
19 ago 2009 . Actualizado a las 11:29 h.«Todo lo que tenía que decir sobre ese asunto lo he dicho y sobre todo lo que he dicho me reafirmo». De esta forma María Dolores de Cospedal reaparecía ayer en rueda de prensa para reafirmarse en que dirigentes de su partido han sido espiados, aunque seguía sin aportar ninguna prueba ni ningún nombre. Lo hizo en la rueda de prensa posterior a la reunión del comité de dirección del PP, que acordó llegar «hasta el final» en el asunto que centra el debate político desde que el pasado 6 de agosto la secretaria general denunciara las escuchas ilegales a sus dirigentes.
De Cospedal afirmó que las conversaciones telefónicas publicadas en los medios de comunicación son pruebas suficientes para corroborar su acusación. Además, exigió al Gobierno que abra una investigación sobre el asunto, como habría pasado «en cualquier país democrático si la oposición dice que se siente observada y se la está espiando», en lugar de insultarla y «salir corriendo a la defensiva».
En respuesta a la pregunta de si el PP acudirá a los tribunales, su número dos explicó que ya presentó una denuncia genérica el pasado 24 de julio por interceptación ilegal de comunicaciones y ahora «son los jueces los que tienen que investiga». Hasta entonces centrará su ofensiva en el Parlamento, donde quiere que comparezcan la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, por las «instrucciones» que da al fiscal general del Estado; el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, por las «filtraciones de conversaciones telefónicas»; y el propio Cándido Conde-Pumpido. Así lo pedirá en la reunión de la Diputación Permanente del Congreso prevista para la próxima semana.
Pero el PP está dispuesto a ir más lejos e insiste en que podría acudir al Tribunal de Estrasburgo y al Parlamento Europeo para denunciar la persecución que sufre por parte del Gobierno. «Vamos a seguir hasta el final», manifestó De Cospedal. «En los ocho años que gobernó el PP nunca en España se produjo este intento de corrupción de las instituciones democráticas» ni se hablaba de «las filtraciones que no forman parte del sumario», aseguró.