El restaurante del Pazo Libunca es uno de los más apreciados por los bloggers gastronómicos de la zona y no solo por su cocina -basada en la sencillez y en la materia prima-, sino también por su espectacular comedor y por la atención exquisita que siempre presta el personal a los clientes.
Al mando de los fogones, desde hace ya cuatro años, se encuentra Óscar García, un joven cocinero naronés formado en el IES Fraga do Eume de Pontedeume que se curtió en las cocinas del Hotel Almirante antes de desembarcar en el Libunca.
García asegura que la propuesta gastronómica del pazo no tiene secreto. «Practicamos una cocina tradicional con un cierto toque moderno, pero sin demasiadas complicaciones», anota el profesional.
Entre los platos estrella de la carta, el jefe de cocina del Libunca destaca cuatro entrantes imbatibles: el salpicón de mariscos con lubrigante y centolla, el pulpo a la plancha sobre crema de patatas, las vieiras a la gallega y los huevos rotos con jamón ibérico. Para los amantes de los sabores marineros, el cocinero recomienda el rape a la cedeiresa o el rodaballo con patatas panaderas, mientras que las carrilleras de ternera estofadas al tinto Mencía y el variado de carnes rojas a la plancha son dos de los platos preferidos por los carnívoros.
Si después de estas propuestas todavía quedan ganas de rematar la faena con algo dulce, García propone el pan viejo de la casa, el flan casero con chocolate y fresas o un refrescante sorbete de limón al cava. Y como despedida, nada mejor que disfrutar de un cafecito en los maravillosos jardines del Pazo. Simplemente, sensacional.