Regístrate gratis y recibe en tu correo las principales noticias del día

Los barones de Terra Galega en la comarca rompen filas

Luís A. Núñez FERROL/LA VOZ.

FERROL

La falta de apoyo de la dirección del partido hacia sus figuras más representativas deja a la formación en la cuerda floja

20 ago 2010 . Actualizado a las 12:26 h.

El minifundio político amenaza con desmembrar la cuarta fuerza gallega. La que lideró el carismático Xoán Gato de camino a las autonómicas del 2009 y que arrebató un 1,14% de la cuota electoral del año pasado. Llámenle falta de afecto -como ayer señalaba el primer teniente de alcalde de Valdoviño, Antonio Montero, a la par que confirmaba su intención de abandonar Terra Galega (Tega)-, desavenencias internas o luchas de poder. La formación empezó a tambalearse cuando pasaron el serrucho al pilar ideológico del grupo, el mismo Xoán Gato.

Como adelantó La Voz el pasado 29 de julio, el ex alcalde de Narón y antiguo secretario general de Tega lleva meses desvinculado de ese partido. Y su marcha, anunciada públicamente -a través de un comunicado- un día después, solo fue la caída de la primera ficha del dominó. Con él, una serie de barones de la formación en la comarca han confirmado o amenazan con abandonar las filas galleguistas.

Uno de ellos, y el que fue el detonante de que Gato hiciera pública su ruptura con Tega, fue José Ignacio Cabezón Lorenzo, actual alcalde de Neda. Su fichaje por el PP es inminente. Algo que desde el partido galleguista definieron como el resultado de una serie de «presiones» de los populares para que el médico de Neda pudiera conservar su plaza en el centro de salud. Esa es solo la punta del iceberg. La parte sumergida son los desencuentros entre el grupo de Neda y la dirección nacional de Tega.

Cabezón, al PP

Antes de fichar por un nuevo equipo, Cabezón trata de cerrar filas en su municipio con un grupo leal que, si bien no todos se marcharán con él al PP, sí buscarán la alternativa para servirle de apoyo desde otro partido ajeno al que militan actualmente. Y algo similar sucede en Valdoviño. Montero acusa a Tega de ser «un partido mudo» y «carente de proxectos e ideas», además de criticar que «nos sentimos abandonados» por la dirección, en manos del cedeirés Xermán Tobío.

Detrás de Montero se presume que emprendan el mismo camino Isabel Álvarez, la alcaldesa, y el otro concejal del partido en Valdoviño, Gonzalo Doce. Ya que todos ellos simpatizan más con las ideas de Gato que con las de los actuales responsables de Tega.

El impás en la situación de Terra Galega fue anterior a las autonómicas de marzo del año pasado, cuando el partido se dividió en dos en una batalla por encabezar las listas electorales. Una de las facciones, liderada por el ex conselleiro Pablo Padín y por el cedeirés Tobío; la otra, por Gato y los alcaldes afines. Fue este último el que optó de candidato, entregó su acta de concejal en Narón y, acabada la romería, pasó a la reserva hasta su incorporación posterior a la Cámara de Comercio.

El coche escoba

Sobre el destino de los ediles escindidos de Tega, La Voz ha podido saber que han tenido contactos con una nueva formación, Converxencia Galega, en la que recoger su ideario bajo los mismos parámetros que en su día diseñó Xoán Gato. En esa lista podrían incluirse parte de los ediles de Neda y los de Valdoviño. Además, fuentes cercanas apuntaron que la representación de Tega en A Capela también podría optar por tomar el mismo camino.

¿Qué implica esto? Que el partido galleguista perdería todos los municipios en los que gobierna en la zona, a excepción del de Narón.