El Concello ferrolano ha contratado a una mutua para que realice una evaluación de riesgos de todos y cada uno de los puestos de trabajo municipales. Será el paso previo a la elaboración de un plan de prevención genérico para el Ayuntamiento. La concejala de Recursos Humanos, Sandra Ríos, informó ayer de que la empresa contratada, del grupo Fremap, empezará la evaluación de riesgos por los puestos de trabajo de los profesionales que desempeñaban su labor en el edificio principal del cuartel Sánchez Aguilera. Estas obras de rehabilitación de fachada y tejado de uralita están paralizadas por la Inspección de Traballo debido a irregularidades detectadas precisamente en la prevención de riesgos laborales.
La empresa empezará por esos puestos porque la inspección exige que antes del 24 de abril el Concello le informe de la aplicación de los protocolos médicos a los trabajadores en esa obra, en la que se manipuló amianto sin las medidas de seguridad obligatorias.
La evaluación de riesgos municipal estaba prevista en los presupuestos para este año con una partida de 37.000 euros, lo que implica que el Concello ya tenía previsto hacer sus deberes en esa materia. De momento, el contrato con la mutua es por la mitad de ese importe, informó Ríos.
La concejala socialista indicó que los concellos están obligados a contar con planes de prevención genéricos, pero no eximen de que cada obra deba disponer de su propio plan de seguridad y salud laboral. Esa documentación va incorporada a los proyectos técnicos, pero no existe en el caso de los trabajos en el Sánchez Aguilera, que están explicados en una memoria. La concejalía de Obras entiende que no era necesario porque se trata de meras tareas de mantenimiento.
En todo caso, el Concello ferrolano deberá corregir las deficiencias detectadas por Inspección de Traballo en materia de seguridad laboral para reanudar las obras en el edificio principal del cuartel.