Las plantas de la ría inician la nueva obra para el naval de las Antípodas
19 oct 2011 . Actualizado a las 12:31 h.Navantia puso ayer el cuentakilómetros a cero en la nueva obra para la Armada australiana, la construcción de cinco módulos para el segundo destructor que se fabrica en las Antípodas basándose en el diseño de las F-100 españolas. Los bloques reportarán 410.000 horas de trabajo a las factorías de la ría ferrolana, que suponen unos seis meses de ocupación para 400 operarios. La obra da un respiro principalmente a los trabajadores de aceros, que son los que están padeciendo en primera instancia la caída en la ocupación de los otros buques en curso en las plantas locales, esto es, dos barcos anfibios para la Marina australiana y la quinta fragata F-100. Implicarán tareas de pre-armamento, aceros y pintura, entre otros, no solo a la plantilla principal, sino también a la auxiliar.
Ayer, a las once de la mañana, se cortaron en las instalaciones de la antigua Bazán las primeras planchas de acero para una de las secciones, la número 109. Tres bloques serán construidos en el astillero ferrolano y los dos restantes, en Fene. Al mismo tiempo, en las factorías locales se está fabricando otro módulo de la zona del domo del buque, que había sido encargado con anterioridad.
La Marina australiana desvió a Navantia Fene-Ferrol la construcción de los cinco módulos tras detectar una demora de un año en la ejecución del proyecto en su país. Navantia confía en que el contrato para la fabricación de los cinco bloques, autorizado por el Gobierno de las Antípodas el pasado mayo, sea firmado en breve.
Guerra se reúne con el comité
El conselleiro de Industria se reúne hoy con el comité de Navantia. Es el encuentro para hablar del dique flotante, a instancias del alcalde. El consejero de Navantia declinó asistir. La diputada socialista Beatriz Sestayo pidió participar, en un día en el que el delegado del Gobierno también convocó a Rey para hablar del naval.