Massa y Hamilton subieron al cajón, y Vettel descendió a la cuarta plaza debido a problemas mecánicos
06 abr 2010 . Actualizado a las 21:21 h.Fernando Alonso tocó el cielo con Ferrari al primer intento. En el circuito de Sakhir, que serpentea entre arena y palmeras, puso fin a su travesía del desierto. El asturiano regresó a lo más alto del podio después de diecisiete meses. Su anterior victoria estaba lejos en el tiempo y en el mapa. Databa del 12 de octubre del 2008, en Japón. Y hacía tres años que no lideraba la clasificación general. Pero Alonso ha regresado a la cima junto a parte de la vieja guardia, Felipe Massa y Lewis Hamilton (McLaren). Tras un 2009 loco, el Mundial parece haber vuelto a su cauce.
Alonso, que partía desde la tercera plaza de la parrilla, superó a Massa en la segunda curva. Un arranque propicio para coger las riendas del cavallino rampante . Al frente del gran premio navegaba en solitario Sebastian Vettel. Sin el margen de maniobra de los repostajes, el guión parecía ya escrito, con un previsible triunfo de Red Bull y dos Ferrari completando el podio. Pero Vettel sufrió un problema en el escape de su coche y perdió su potencia. El alemán se fue consumiendo. En su descenso cayó hasta la cuarta plaza. Y si el gran premio fuera más allá de la vuelta 49, también hubiera cedido ante Nico Rosberg, el quinto clasificado. Rosberg volvió a ganar el pulso a Michael Schumacher, que concluyó sexto justo por delante del vigente campeón, Jenson Button.
Alonso, una vez situado a los mandos de la carrera, manejó su monoplaza con autoridad. Exprimió los tiempos de su F10 sin titubeos cuando ni siquiera parecía necesario. Nadie pudo seguir su estela.
Ferrari, cuya fiabilidad se daba por supuesta, dio muestras de una gran superioridad en el primer combate de la temporada. Abrió brechas inesperadas con McLaren, Red Bull y Mercedes, cuyos pilotos acabaron a más de 23 segundos de Alonso y a más de 7 de Massa, a pesar de que el brasileño indicó después que había tenido problemas con la temperatura de su motor.
Jaime Alguersuari (Toro Rossa) concluyó en el puesto 13. Pedro Martínez de la Rosa no pudo finalizar. Su Sauber sucumbió a un problema hidráulico en la vuelta 29. Y los Hispania también dijeron adiós de forma prematura. Son otras guerras de un Mundial que, de momento, apuesta al rojo.