Jesús Valero, responsable de la consultora Arthur Andersen (ahora Deloitte), compareció hoy en el Parlamento gallego.
22 oct 2007 . Actualizado a las 19:17 h.Jesús Valero, responsable de la consultora Arthur Andersen (ahora Deloitte), que elaboró un estudio sobre el desarrollo económico financiero sobre el proyecto de la Ciudad de la Cultura en el año 2001, ha asegurado hoy que su trabajo se limitó a señalar los riesgos existentes a partir de la documentación de la que dispusieron en ese momento.
Valero, que es el cuarto de los comparecientes en la comisión de investigación sobre la totalidad de las actuaciones públicas referentes a la Ciudad de la Cultura, ha señalado en el Parlamento que esos riesgos, entre los que citaba la inadecuación y objetivos no realistas de costes y plazos, no eran «ni un juicio ni un pronóstico».
Según el responsable de la consultora, que ha comparecido en presencia del abogado de la compañía Deloitte, en la cual se integra ahora Arthur Andersen, los riesgos descritos se derivan de «proyectos similares», y ha rechazado que tuviesen una «bola de cristal».
En cualquier caso, y a preguntas del representante del PPdeG, Valero ha dicho que informar sobre los riesgos, si los hubiese, no sólo no le impidió finalizar su trabajo, sino que formaba parte del mismo.
Valero ha informado a los miembros de la comisión de investigación de que su estudio no valoraba «la viabilidad ni la conveniencia» del proyecto, y ha apuntado que señalar la falta de recursos «no es cuestionar el proyecto», sino que la autoridad debe desarrollar determinadas acciones para subsanar esas deficiencias.
El representante de la consultora ha explicado que su trabajo, desarrollado entre finales del año 2000 y mediados de 2001, se limitó a un momento inicial del proyecto, en el que el desarrollo de las ponencias era «limitado», así como el plan de inversiones elaborado por el arquitecto ganador del concurso de ideas, Peter Eisenmann.
Además, Valero ha indicado que la estimación sobre el número de visitantes, unos 350.000 al año, se realizó como una extrapolación de otras experiencias, entre las que citó el museo Guggenheim de Bilbao y la expectativa generada por el Xacobeo.
Para el representante del BNG, Xosé Ramón Paz Antón, la viabilidad económico-financiera de un proyecto debe ser anterior a la puesta en marcha del mismo, y en cualquier caso, si se hace después, habrá que intentar seguir las recomendaciones.
Sin embargo, Paz Antón ha dicho que en el caso de la Ciudad de la Cultura no fue así porque el proyecto fue una «iluminación» del ex conselleiro de Cultura, Xesús Pérez Varela y del ex presidente de la Xunta Manuel Fraga.
Xaquín Fernández Leiceaga (PSdeG) ha lamentado que entre los riesgos de los que advirtió Arthur Andersen no estuviese el «mayor», que era, a su juicio, Pérez Varela.
El diputado socialista ha criticado el aumento de la superficie de explotación del proyecto, ya que en el año 2001 ésta era de 75.000 metros cuadrados, para los que la consultora calculó un déficit de explotación de 50 millones de euros y, sin embargo, ahora la superficie ha aumentado a entre 115.000 y 130.000 metros cuadrados.
Por su parte, el diputado del PPdeG Ignacio López Chaves ha vuelto a denunciar el «boicot» de socialistas y nacionalistas a la comisión, ya que, según ha dicho, continúan vetando las comparecencias solicitadas por su grupo, así como la documentación solicitada para realizar sus intervenciones.
López Chaves ha echado en falta los informes sobre viabilidad económica y financiera del proyecto a partir de la redefinición del mismo, hecha por el Gobierno actual, así como los informes relativos a la gestión, a mantenimiento y a personal, y ha acusado a PSdeG y BNG de «manipular» el informe de la consultora en su beneficio.